La subsecretaria de Industria, Alejandra Man, dio a conocer la iniciativa presentada por la UIF para diversificar productos destinados a las automotrices, como una alternativa válida para encontrar una salida. Aseguró que otras empresas también están pensando en nuevos productos, de alto valor y demanda en el exterior, entendiendo que hay que cambiar la lógica de exportar únicamente al continente. La decisión de habilitar nuevas producciones depende del gobierno nacional y se están llevando adelante reuniones mensuales del área aduanera especial, además de la mesa de trabajo con las empresas. Por el momento no se aprecia que busquen levantar todo e irse, porque hay un gran capital invertido en la provincia. En el corto plazo esperan que la nación entienda que se necesita tiempo y prorrogue la eliminación de aranceles.
Río Grande.- La subsecretaria de Industria de la provincia, Alejandra Man, dialogó con FM La Isla sobre la situación de la industria fueguina y dio a conocer una iniciativa presentada por la UIF para diversificar productos destinados a las automotrices. Aseguró que hay otras empresas pensando también en la diversificación, y mirando no solamente al continente sino al exterior.
La funcionaria participó de la reunión mensual de la comisión del área aduanera especial y destacó “la importancia de tener estos espacios para discutir cuestiones que tienen que ver con lo operativo del subrégimen, porque se necesita acreditar el origen de los productos y también seguir exportando. En esta oportunidad llevamos un proyecto que busca facilitar el régimen de acreditación de origen y simplificar el trámite. Es un nuevo esquema de acreditación, modificamos los plazos en los cuales las empresas pueden exportar sus productos, modificamos los formularios que requieren información, porque nunca hubo posibilidad de modificar el esquema de cómo se acredita origen. Se trata de simplificar el trámite”, explicó.
Hoy la industria pende de un hilo, desde que salió el decreto 333 que redujo a la mitad los aranceles de importación y prevé eliminarlos por completo el 15 de enero. “Hemos convocado a los sindicatos a entablar una mesa de diálogo abierto con las empresas y con todos los involucrados. Desde la provincia tratamos con estas mesas de trabajo de buscar un entendimiento para sacar del eje esto de que fabricar en Tierra del Fuego es caro. En base a la información que tenemos de las mismas empresas, el costo de la fabricación no es el problema. Luego viene la cadena logística, la distribución, los acuerdos comerciales que se tienen, y es lo que tiene incidencia en el precio final del producto. Tenemos que dejar de discutir el costo de fabricación, que no es un problema, porque la producción de Tierra del Fuego sigue siendo competitiva respecto de los productos importados, pero hay un montón de cosas involucradas en toda la cadena y necesitamos contar con esa información para plantear una solución viable”, señaló como primer punto.
“Nuestra preocupación está en la pérdida potencial del empleo, como lo expresó el gobernador en reiteradas oportunidades. No queremos que mañana la gente quede en la calle y no sabemos qué va a pasar en enero”, sostuvo.
Se resignó a que el rumbo nacional no se puede torcer y habrá que adecuarse para sobrevivir. “Hoy la mirada del gobierno nacional tiene que ver con su anhelo de reducir el valor de los productos de venta al público y cree que entrar en competencia con productos importados es la solución. En Tierra del Fuego estamos hablando de celulares, pero lo mismo pasa con las textiles y con un montón de otros productos. La política nacional apunta al libre mercado y está más que claro. Estamos viendo un fenómeno de desindustrialización en el país, de todas las industrias de la Argentina y realmente es muy triste. Si no hay medidas nacionales que busquen un equilibrio, es muy difícil competir con productos chinos de un día para otro. Nadie le compite a China en ningún lugar del mundo”, enfatizó.
Respecto de la industria plástica, marcó diferencias porque no tiene competencia. “Tenemos una empresa muy importante radicada en Río Grande (Río Chico), que exporta a muchos países y es la número 2 del mundo porque se dedica exclusivamente a la fabricación de un producto para un mercado muy puntual. Hay un mercado brasilero enorme, un mercado latinoamericano enorme y las silobolsas se fabrican en Río Grande. Es realmente increíble el volumen que tienen, sin embargo también están viendo una reducción, porque el impacto de la macroeconomía se da en todos los sectores productivos. Ahí es distinta la lógica porque no hay competencia de silobolsas, por más que abran la importación. En los productos de consumo masivo sí lo podemos palpar. La industria plástica tiene una lógica totalmente distinta, la industria textil tiene otra y la electrónica tiene la suya. Cada rubro tiene distintas dificultades y oportunidades de mejora”, expresó.
Impulsado por el gobierno fueguino, se están dando una serie de reuniones para encontrar una salida. “El gobierno está pidiendo al sector empresarial sentarnos a discutir para ver cómo podemos sacar a flote la industria de Tierra del Fuego. Desde la provincia llevamos la iniciativa de lograr una prórroga de la aplicación de la segunda parte del decreto, que elimina a cero los aranceles. La idea no es que no se aplique, porque entendemos que es una decisión tomada y así nos lo dijeron, pero aspiramos al menos a una prórroga por seis meses para buscar una alternativa”, indicó.
Dentro de las opciones mencionó el decreto 334, “que tiene que ver con el régimen de exportación simplificado, que es una oportunidad para que las empresas puedan exportar sus productos puerta a puerta, directo al público. Para las empresas esto les representa una oportunidad de mercado. Entre todos tratamos de buscar una solución, pero sinceramente es muy complejo y necesitamos que todas las partes estén sentadas, porque todos estamos en el mismo ecosistema de producción industrial y los más interesados deben ser los empresarios”.
Una propuesta concreta
La funcionaria destacó que en la reunión de la comisión del área “se trató una iniciativa que presentó la UIF, que es la unión industrial fueguina, que tiene que ver con la actualización de procesos productivos de módulos electrónicos para la fabricación de vehículos. Esto es importante porque se trata de un nuevo producto y es una posibilidad de diversificación. Las empresas están en la búsqueda de diversificar su cartera de producción porque tienen capacidad instalada y hay una inversión muy fuerte en Tierra del Fuego. Hoy no están pensando en levantar todo e irse, porque tienen capital en la provincia y tienen procesos productivos aprobados para seguir produciendo, pero esto se tiene que dar en consenso con el gobierno nacional, que es el que termina aprobando los procesos productivos”, observó.
“Con los productos para automotrices uno tiene más previsión, porque la fabricación tiene tres años de continuidad y eso nos daría mayor estabilidad y seguridad. Sé que otros empresarios están buscando alternativas y por todos lados hay tires y aflojes. Lo más lógico es tratar de diversificar nuevos productos y desarrollar productos de alto valor y de consumo masivo”, puntualizó.
“Yo soy positiva y creo que la industria de Tierra del Fuego se va a levantar. Tenemos muchas cosas en contra pero tengo esperanza en esta posibilidad de diversificar productos. Las empresas son las que tienen los conocimientos del mercado y la salida es plantear productos con nuevas cadenas de valor a nivel nacional e internacional, porque tenemos que salir de la lógica de la exportación absoluta al continente. Hoy necesitamos diversificarnos y vender afuera los productos fueguinos. Eso le va a dar un respiro al régimen. Es un momento para repensar, está la oportunidad, tenemos el fondo de ampliación de la matriz productiva, que tiene que ser utilizado”, concluyó.