La ministra de Industria, Producción y Ambiente expuso un panorama nunca visto en materia de asfixia hacia las empresas textiles. En la última reunión de la comisión del área aduanera especial no fueron aprobadas las acreditaciones de origen de Australtex, y se suma la interpretación del decreto 594 que pone cupos de producción que hacen inviable a la actividad. Agregó que en el encuentro “cayó la cautelar de la empresa BARPLA y de la empresa Sueño Fueguino, así que fue un día muy gris para la industria textil”. Como corolario, hay una alta incidencia de los productos importados que afecta las ventas de las empresas.
Río Grande.- La ministra de Industria, Producción y Ambiente, Karina Fernández, dialogó con FM Aire Libre sobre una situación sin precedentes que están viviendo las empresas textiles de la provincia, por una postura del gobierno nacional de poner todo tipo de restricciones a la producción.
En principio se refirió a la reunión de la comisión del área aduanera especial el pasado jueves y sostuvo que “fue un encuentro muy complejo, con un estado muy crítico para las empresas. No están tocando el subrégimen pero literalmente las están asfixiando y no hay una respuesta favorable desde nación. Como primer orden del día se tocaron las acreditaciones de la empresa Australtex, estuvimos más de dos horas exponiendo la postura a nivel provincial, inclusive estaba la Cámara y uno de los representantes de la empresa que pudo explayarse sobre lo que está postulando nación, porque dicen que no cumplen con la integración de insumos nacionales a su proceso productivo”.
“La postura de la empresa es que no hay proveedores, porque hay un listado nacional donde no se ha anotado casi ninguno. Con uno de los anotados la empresa Australtex entró en un proceso de negociación para poder comprar insumos nacionales, pero la postura de nación fue rechazar las acreditaciones de origen. Obviamente se ejecutan las garantías y la empresa tendría que devolver los beneficios gozados, con la crisis actual que tienen las empresas textiles y confeccionistas”, planteó.
“Hubo una postura muy firme nuestra y para los que estábamos ahí fue una falta de respeto hacia el pueblo y hacia las empresas, porque la integración de productos nacionales es sistémica y no se ha podido conseguir. No es que la empresa no cumpla, sino que hay un problema de demanda de lo que son insumos nacionales”, explicó.
“Cuando vamos a la votación, ellos son mayoría y en desmedro de nuestra industria y de nuestra gente votaron negativamente. La empresa Australtex hoy no tiene la acreditación de origen. La mercadería ya fue exportada pero con garantías. Ellos enviaron una nota al gobierno nacional para que tuviera en cuenta esta situación y lo que hizo el gobierno es empezar a tratarlo pero no con las acreditaciones anteriores. Esto es algo histórico que viene sucediendo, porque en toda la vida no se ha podido conseguir o concretar la integración de insumos nacionales a los procesos productivos de Australtex”, aseguró.
“Realmente yo creo que hay una posición de nación que no acompaña a las empresas de nuestra provincia, inclusive en la reunión de la comisión cayó la cautelar de la empresa BARPLA y de la empresa Sueño Fueguino, así que fue un día muy gris para la industria textil. Fue una reunión muy compleja”, reiteró.
Comparó esta situación con lo que ocurre en el mundo, porque “a nivel global las grandes potencias valorizan la industria como eje de desarrollo y lo que vemos es que este gobierno nacional, con estas políticas actuales, va en contra. Afecta la producción y con ello afecta el empleo de nuestra gente”.
Consultada acerca de si esto pone en riesgo la continuidad de la empresa, dijo que “son condiciones que llevan a análisis muy profundos, algunas empresas están con cautelares y tenemos que sumar un contexto que complejiza mucho más, que tiene que ver con el decreto 594, en el artículo 2. La base imponible que ellos toman para la reducción de los beneficios a futuro de las textiles la hacen en pesos, sin indexar y con valores históricos. Todas las empresas, no solamente las que tienen cautelar, han recibido una intimación de pago millonaria, para la devolución del beneficio”, informó.
“Es una asfixia, porque pasado el cupo quedan sin beneficios. De acuerdo a lo que dice Ingresos Públicos ellos se están basando en índices históricos sin actualizar y reducen el incentivo a niveles insignificantes. Esto hace inviable la actividad”, sentenció.
Esta situación está en vías de judicializarse y habrá que ver si las empresas se pueden sostener hasta que la justicia resuelva. “Nosotros veníamos trabajando en esto, estuvimos reunidos hace un mes y trabajamos en esto desde el año pasado. El gobierno está acompañando a todas las empresas, hemos tenido reuniones con los dueños, con Garófalo de CAFIN, con los sindicatos, hemos explicado la situación, nos hemos acercado mediante notas y hemos expuesto la posición de la provincia en la comisión del área aduanera especial anterior, para que pueda quedar plasmado”, detalló de las acciones.
“Esto no puede quedar así y estamos viendo todas las estrategias posibles para poder mediar y tratar de solucionar esta problemática. No solamente no se llegó a la acreditación de Australtex, sino que también tenemos la interpretación del artículo 2 del decreto 594, y una apertura desmedida de las importaciones por la reducción arancelaria”, agregó.
“La verdad es un combo de normativas, de restricciones, de exclusiones, que realmente asfixian al sector y se compromete muchísimo a la industria, que es un pilar fundamental de nuestra provincia en cuanto al empleo”, subrayó.
Dado que Blanco Nieve tiene las cuentas embargadas por ARCA, dijo que “hubo reuniones con los dueños, que vinieron a nuestra oficina hace muy poco. Nos contaron lo que estaba pasando y no teníamos todavía esta cuestión de las cuentas embargadas. Ellos venían con una posición de conversar y ver hasta cuándo se podían sostener, nos contaron cuál era su mayor grado de dificultad, que tiene que ver con la competencia de productos importados. Se han perdido los valores de referencia de los productos ingresados y esto hace muy difícil competir. Ahora se suma la intimación que le hacen a todos sobre la reducción de los beneficios”.
La ministra se atrevió a afirmar que “nunca habíamos estado en una situación tan compleja. Desde nación no están tocando el subrégimen pero están poniendo todas las restricciones y todas las condiciones para que la situación sea cada vez más compleja. No somos escuchados en la comisión del área, donde puso voz la UOM, la UIF y obviamente la provincia, yo como presidente de la comisión, y no vemos que enfrente haya una respuesta positiva ni una posibilidad de una mesa de diálogo”, dijo.
“Hemos pedido que se frente todo esto por tres meses para poder organizarnos mejor y ver cómo las empresas pueden llevar adelante la complicación que hoy tienen, pero tampoco tuvimos respuesta sobre eso. Vamos a seguir al frente de esto, como lo ha hecho siempre el gobernador Gustavo Melella, en protección de la industria y de los puestos de trabajo. No hay que bajar los brazos, porque hemos pasado diversas situaciones anteriores donde también veíamos el final del túnel y hemos podido salir adelante”, recordó.
“Veremos qué se plantea en el ámbito judicial, tenemos que seguir generando vías para seguir defendiendo la industria. Uno no puede bajar los brazos hasta el final y la gente no se merece que nadie baje los brazos. Las empresas van a seguir trabajando y van a seguir adelante con la vía judicial. Hoy están con un reclamo por la vía administrativa por el decreto 594, después irán a la judicial y seguramente desde la provincia vamos a estar acompañando todas estas medidas, poniendo todo lo necesario, como lo hemos hecho siempre”, concluyó.

