Jorge Henn explicó cómo se implementa el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) en su provincia, con la construcción de un nuevo puerto multipropósito en Timbúes. Resaltó que la herramienta permite estabilidad fiscal, desarrollo logístico y empleo genuino, y pidió un debate maduro sobre el federalismo económico y la infraestructura portuaria del país.
Río Grande.- El subsecretario de Transporte y Logística de la provincia de Santa Fe, Jorge Henn, analizó en diálogo con FM Master’s la experiencia de su distrito con la implementación del Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI).
En su provincia, la normativa ya tuvo un caso concreto de aplicación: la construcción de un nuevo puerto multipropósito en la zona de Timbúes, un proyecto de 300 millones de dólares que promete cambiar el mapa logístico del litoral argentino.
“Estamos hablando de una inversión que no solo es estratégica para la hidrovía, sino que también genera más de trescientos empleos directos en la etapa de construcción y más de doscientos cuando el puerto esté operativo”, señaló Henn.
“Además, el impacto indirecto en la economía regional puede multiplicarse por cuatro o por cinco, porque la logística genera una gran cadena de valor”.
El funcionario remarcó que el RIGI es una herramienta que brinda previsibilidad y estabilidad fiscal, dos factores que, según él, son determinantes para atraer inversiones de largo plazo.
“El empresario lo que pide a la política son reglas de juego claras. Si logramos sostenerlas en el tiempo, podemos garantizar modelos de desarrollo sostenido”, afirmó.
Un puerto sustentable y diversificado
Henn explicó que el nuevo puerto de Timbúes no se trata de una ampliación de infraestructura existente, sino de una terminal completamente nueva, con enfoque ambientalmente sostenible y multipropósito, capaz de operar fertilizantes, granos, combustibles y contenedores refrigerados.
“Es un puerto que rompe la lógica tradicional de carga a granel. Incorporamos criterios de trazabilidad y sostenibilidad: que los camiones no viajen vacíos, que se reduzca la huella de carbono y que el desarrollo logístico esté vinculado a un modelo ambientalmente responsable”, destacó.
Además, subrayó la importancia de la hidrovía Paraná-Paraguay como eje del desarrollo productivo nacional. “Si no hay una apuesta firme a la logística —desde los caminos rurales hasta los parques industriales, pasando por las rutas y el sistema energético— siempre vamos a andar rengos. La logística no puede ser un tema secundario en la agenda pública”, sostuvo.
Proceso legislativo y rol provincial
Consultado sobre el proceso de aprobación del RIGI en Santa Fe, el subsecretario explicó que la adhesión provincial fue “pacífica” y con consenso político.
Hubo, según describió, una “fuerte convicción” del ministro de Desarrollo Productivo, Gustavo Puccini, y del propio gobernador, para acompañar el proyecto.
“Estas discusiones tienen que darse en los ámbitos institucionales. Las legislaturas son espacios de diversidad, se puede estar a favor o en contra, pero el objetivo debe ser construir reglas estables. Nosotros defendemos una gestión que puso el equilibrio fiscal arriba de la mesa, pero que también entiende que sin inversión en infraestructura no hay desarrollo posible”, explicó.
El funcionario agregó que el RIGI firmado por el ministro de Economía, Luis Caputo, permitió viabilizar el proyecto portuario, y adelantó que existen nuevos proyectos en evaluación dentro del mismo esquema de incentivos.
Federalismo logístico y visión nacional
En una parte clave de la entrevista, Henn hizo una reflexión profunda sobre la necesidad de construir un “federalismo logístico real”, capaz de descentralizar la concentración portuaria del país.
“No puede ser que Buenos Aires o Ezeiza sigan siendo los únicos puntos para canalizar la carga nacional. Es una lógica centralista que viene desde 1810. Necesitamos puertos en las provincias, rutas que conecten, inversiones energéticas, porque sin eso el desarrollo federal es solo un discurso”, expresó.
El subsecretario sostuvo que la baja de la carga impositiva para proyectos estratégicos, la posibilidad de importar maquinarias sin impuestos y el acceso a divisas para las inversiones son pasos fundamentales para fortalecer las economías regionales.
“Los gobernadores representan intereses provinciales. El diálogo, la calidad educativa, las obras públicas y la logística son pilares para mejorar la calidad de vida de la gente”, insistió.
Reflexión final
Al cierre de la nota, Henn enfatizó que la logística, la productividad y la competitividad deben estar al centro de las políticas públicas, dado que “no hay nada más importante en la política que mejorar la calidad de vida de la gente. Y eso solo se logra con desarrollo real, con empleo en blanco, con infraestructura que conecte y con decisiones que trasciendan los gobiernos”.
La experiencia santafesina con el RIGI deja, según el funcionario, un mensaje claro para otras provincias como Tierra del Fuego, donde el régimen aún está en debate legislativo al considerar que “el desarrollo logístico federal es una deuda histórica que el país debe saldar”.
