La senadora nacional electa por La Libertad Avanza, Belén Monte de Oca, adelantó que diciembre será el punto de partida de una nueva etapa de reformas estructurales “para cambiar la Argentina para siempre”. Con críticas al oficialismo provincial, cuestionamientos al modelo de gestión municipal y una defensa cerrada del rumbo del presidente Milei, Monte de Oca habló de “madurez política”, “fin de la politiquería” y un Congreso que se reconfigura con tensiones internas, movimientos inesperados y diálogos que, asegura, comenzaron antes de asumir.
Río Grande.- En una extensa entrevista con Radio Provincia, la dirigente libertaria y futura integrante de la Cámara Alta repasó el escenario político nacional y fueguino a días de asumir.
Este viernes, a partir de las 11, juran los 24 senadores electos en las ocho provincias que también votaron esta categoría en las elecciones legislativas de octubre, donde ingresaron dos por la boleta que ganó y uno por la fuerza que salió segunda y asumirán formalmente el 10 de diciembre.
En este marco, Monte de Oca expuso sin rodeos la hoja de ruta del oficialismo nacional para los primeros meses de gestión como así también las negociaciones para definir bloques legislativos, el debate sobre la reforma laboral y la posibilidad de un diálogo institucional con el gobernador Gustavo Melella,
Reformas “estructurales” y sesiones extraordinarias: el oficialismo entra en modo batalla
Monte de Oca confirmó lo que ya se rumoreaba en el entorno libertario, el Gobierno nacional prepara un paquete de reformas que requerirá sesiones extraordinarias desde diciembre, con la prioridad colocada en una profunda modernización laboral.
“Se viene esta segunda etapa del gobierno nacional, con reformas que Argentina necesita. El presidente necesita del Congreso y si nos acompañan los senadores y diputados, podremos avanzar rápido”, afirmó.
Sobre las tensiones con los gremios, que ya activaron estados de alerta ante un posible retroceso en derechos laborales, Monte de Oca pidió “prudencia y afirmó que cualquier debate deberá realizarse “sobre un texto definitivo”, que, según anticipó, se dará a conocer en los próximos días.
Pese a la cautela discursiva, la senadora electa dejó claro el rumbo al sostener que trabajaremos para tener “menos impuestos, un mercado laboral flexibilizado, incentivos a la inversión privada y una reforma penal que actualice el Código de 1921”.
Reconfiguración del Congreso: alianzas, bloques y señales de la nueva mayoría
Consultada por el clima político dentro del Congreso, Monte de Oca admitió que la “conformación de bloques y alianzas genera movimientos intensos, algunos previsibles y otros más sorpresivos”.
En particular, se refirió al armado de un “bloque federal” entre gobernadores del norte y de Misiones, que busca devenir en un actor clave para negociar leyes.
La senadora insistió en la apertura de La Libertad Avanza al manifestar que “desde el primer día mostramos diálogo, queremos un bloque fuerte, pero vamos a respetar los colores políticos, lo importante es que podamos sentarnos todos, con cordialidad y sin chicanas”.
Sin embargo, dejó trascender un dato político no menor al anunciar que “Patricia Bullrich conducirá el bloque libertario en el Senado, y detrás de esa conducción se ordenará el resto de la estrategia parlamentaria”.
La reunión cordial entre Bullrich y la vicepresidenta Victoria Villarruel fue para Monte de Oca “un gesto de institucionalidad” que anticipa un clima menos áspero que el que muchos pronostican.
Tierra del Fuego y la Nación: ¿habrá diálogo con Melella?
Uno de los puntos más sensibles de la entrevista apareció cuando se le consultó sobre la relación con el gobernador Gustavo Melella, para lo cual Monte de Oca evitó confrontar abiertamente, pero dejó planteado un límite claro al señalar que “ojalá podamos conversar con el Gobernador, pero esto requiere madurez política, no puede seguir la politiquería, porque cuando no hay diálogo quienes pagan los platos rotos son los fueguinos”.
“Hasta ahora, señaló, solo hubo intercambios protocolares tras las elecciones”.
Las conversaciones profundas, afirmó, deberían llegar “cuando ya estemos en funciones”.
El mensaje pareció dirigido tanto al Ejecutivo provincial como a la interna política local porque La Libertad Avanza necesita una interlocución institucional para avanzar con proyectos, pero no está dispuesta a convalidar confrontaciones estériles.
Críticas al municipio: “Presentaron una Ushuaia que parece Suiza”
Monte de Oca no esquivó el análisis local y al referirse al presupuesto municipal y a su paso por las comisiones del Concejo Deliberante, fue categórica al manifestar que “parecía que Ushuaia era Suiza, presentaron una ciudad impecable, donde todo funciona perfecto, eso está lejos de la realidad”, reprochó.
Criticó especialmente la falta de “planificación urbana y la ausencia de un proyecto serio de ordenamiento para 2026”.
También anticipó que la “decisión sobre la aprobación del presupuesto municipal quedará en manos de la nueva concejal Marjorette Saldías Cárcamo”, aunque aclaró que “su espacio ya tiene un límite infranqueable, no acompañarán aumentos de impuestos o tasas bajo ninguna circunstancia”.
Para Monte de Oca, el dilema es claro, dado que “no aprobar un presupuesto genera caos administrativo, pero aprobar uno que no representa las prioridades de la gente también tiene consecuencias”.
El verano legislativo con reforma laboral, baja de impuestos y un nuevo Código Penal
La senadora electa sintetizó el orden de prioridades que el oficialismo nacional empujará desde diciembre como serán la “modernización laboral: cambios profundos en contratación, despidos, convenios y modalidades de trabajo, la reforma tributaria: quita de impuestos distorsivos para incentivar inversión y el nuevo Código Penal, tipificación de delitos modernos y actualización integral de una legislación centenaria”.
“Todo está pensado estratégicamente, todo está concatenado”, aseguró.
Un cierre que anticipa conflicto y negociación
Monte de Oca, que en pocos días asumirá formalmente su banca, dejó un mensaje final que combina entusiasmo y advertencia al señalar que “habrá diálogo, pero bajo nuevas reglas, habrá reformas, pero con costo político, habrá interlocución institucional, pero sin convalidar el estilo del oficialismo fueguino”.

