El actual asesor del legislador Agustín Coto, Rolando Correa, denunció la complicidad del parlamentario con el diputado Santiago Pauli para cobrar retornos de sus asesores, mediante una triangulación del dinero a través de la cuenta de Martín Agüero, nombrado en el Congreso de la Nación. Describió que la maniobra era depositar a la cuenta de Agüero el ítem por desarraigo de 500 mil pesos que cobran los asesores de Río Grande, para costear gastos de las sedes partidarias. Correa había sido designado en primer término como asesor de Pauli en el Congreso, pero no le asignaron tareas y trabajaba como puntero político en la provincia. La misma labor continuó realizando cuando lo tomó bajo su paraguas Agustín Coto, según dijo. Aseguró que siempre estuvieron al tanto las autoridades del partido, y los parlamentarios Pauli, Coto y Gracianía.
Río Grande. – Un verdadero escándalo se desató en La Libertad Avanza a partir de las declaraciones del actual asesor del legislador Agustín Coto Rolando Correa, que aseguró por Radio Provincia que el diputado Santiago Pauli pedía como retorno el ítem por desarraigo para costear gastos del partido. Además, denunció la complicidad con el legislador Coto para hacer una triangulación del dinero a través del asesor del Congreso Martín Agüero, a cuya cuenta era depositado.
Correa contó que primero comenzó como “ñoqui” del Congreso, porque no fue nunca a Buenos Aires y no le asignaron tareas, sino que con fondos públicos trabajaba como puntero político y se dedicaba a hacer proselitismo “casa por casa”, para dar a conocer a los referentes libertarios, según dijo.
En principio informó que actualmente es “un empleado legislativo designado por Agustín Coto, con categoría 20”, si bien “desde junio no piso más La Libertad Avanza”, y relató que “el año pasado fui nombrado en el Congreso por Santiago Pauli por dos o tres meses, en noviembre me dio de baja y me dijo que iba a estar designado en la Legislatura provincial. Ahí es donde me nombra Agustín Coto”.
El asesor puntero
“En el Congreso únicamente figuraba en los papeles, porque el único día que fui a Buenos Aires fue para firmar el contrato allá y después no me fue asignada ninguna tarea. Mi trabajo acá era ir a ver a la gente, llevarle la propuesta, hacerlos conocer a Pauli, a Coto, a Gracianía, a Miguel Rodríguez, actual candidato por La Libertad Avanza”, señaló sobre su labor como puntero político.
Explicó que la gente “no conocía” a los referentes locales del mileísmo, “salvo por el entorno de ellos que es la iglesia (evangélica). Mi trabajo era ir casa por casa a hacerlos conocer y para esa función me habían designado. Yo estaba dispuesto a hacer trabajo administrativo, pero ellos querían el desarraigo”, afirmó.
Pese a su labor de puntero, “en el Congreso cobraba 750 mil pesos y no recuerdo la categoría en que estaba. De ese monto no me pidieron dinero, pero una vez que me nombraron en la Legislatura sí me empezaron a pedir. Los primeros dos o tres meses le pasé el dinero en mano al diputado (Pauli) porque todavía no tenía el home-banking. Eso fue retroactivo porque me nombraron entre diciembre y enero, cobré en febrero y ahí le aboné en mano la plata en el partido, en calle Pellegrini. En marzo fue igual y después ya le transfería a una cuenta de otro asesor de Santiago Pauli. Me había dicho que le transfiriéramos a él, a otra cuenta, del asesor Martín Agüero”, precisó sobre la triangulación de los fondos públicos.
El desvío de fondos
Correa también dio cuenta del desvío de fondos públicos para costear gastos del partido. “Yo transfería el total del desarraigo. A nosotros nos depositan el sueldo y el desarraigo, y el desarraigo lo pasaba a esa cuenta, porque era para pagar las dos sedes, tanto la de Pellegrini al 700 como la de la calle Tolhuin”, sostuvo.
Aclaró que “esto no fue charlado antes. Cuando ellos me convocaron en 2023 para las elecciones provinciales, el arreglo fue que les hiciera la campaña porque tenía conocimiento de la calle. Yo a cambio pedí un puesto en la Legislatura o en el Concejo Deliberante. Me dijeron que sí, que no iba a haber problema, pero a partir de este año empezaron a exigirme el desarraigo, diciendo que esa plata no era mía sino del partido”, señaló.
“Yo fui el primero que me opuse, porque tenía problemas familiares. El junio le dije al diputado que más de 200 mil pesos no le podía pasar, porque necesitaba el resto, y en uno de los audios se escucha que él me pide repetidamente que quiere contar con el 100% del desarraigo”, dijo sobre un monto que ronda los 500 mil pesos.
Agregó que hizo propuestas para recaudar fondos pero no fueron tomadas en cuenta. “Yo le propuse un par de cosas para ayudar a la gente, para recaudar plata, porque mi trabajo es el contacto directamente con la gente, pero siempre había una negativa. Yo propuse vender empanadas para recaudar plata para el partido y con eso se iba a ayudar a la gente, pero siempre se negaron”, manifestó.
Ninguna asesoría
Consultado acerca de en qué asesora a Coto actualmente, dijo que “el tema asesor es un nombre nada más. Mi trabajo era en la calle, iba a visitar a la gente necesitada para saber cómo se les podían solucionar los problemas. Visité a muchos jubilados que no sabían usar aplicaciones. Le informé a Miguel Rodríguez y a Pauli que podíamos asesorar a la gente y enseñarle, pero todo eran negativas. ‘Para qué’ me decían. Hay gente que no sabe manejar una aplicación de luz o una aplicación de gas. Muchos abuelos no saben manejar la tecnología y le llevé todas estas propuestas de inquietudes de la gente y nunca tuve una respuesta positiva”, expresó.
Grabaciones en proceso
Correa contó además que grababa las conversaciones con Pauli, como lo hace con todas las comunicaciones telefónicas. “Ese es un sistema que traen la mayoría de los teléfonos de media y alta gama. Yo eso lo activé hace mucho tiempo por el tema de las estafas virtuales que hay. Uno de mis hijos había caído en una de estas trampas donde le pedían plata a amigos de él. Esta aplicación estaba activada y cuando él (Pauli) me llama, la llamada queda automáticamente grabada. No es que yo estaba esperando que el diputado Pauli me llame para grabarlo”, aclaró.
Puntualizó que el audio que se difundió corresponde a “una charla que fue en junio. Yo ya venía viendo las maniobras y las mentiras que decían desde nación, de parte de Milei, que nunca iba a tocar al jubilado, que no iban a tocar los impuestos. Uno confió en ellos en su momento en la campaña y resulta que fueron unos mentirosos que no tienen palabra”, criticó.
La presunta extorsión
Como otra cara de la moneda, Correa relató cómo advirtió a allegados a Pauli que, si lo daban de baja en la Legislatura por no aportar el desarraigo, tenía la grabación de las conversaciones. “Al mes siguiente, en julio, le di el 100% del desarraigo, y después me puse a pensar que nos mienten a la misma gente que estamos al lado de él, no nos mantienen la palabra, y decidí no pasarle más desde agosto. No me dieron de baja porque yo le dije a una persona que labura con Santiago Pauli, que está nombrada en la Legislatura también y es una miembro fiel de la iglesia, que le diga que me dé de baja, que yo tenía la llamada de él en el teléfono. Al final me terminó bloqueando”.
Según Correa, él no filtró la conversación con Pauli, que sería su herramienta de permanencia en el cargo. “Hace dos semanas y media perdí el teléfono, no es que yo lo quise denunciar, porque yo mantengo la palabra. En una llamada que le hice a Pauli le dije ‘Santiago, yo te voy a pasar todos los meses los 500 mil pesos, pero vos manteneme el contrato hasta el 2027’. No lo denuncié a la justicia porque mantengo la palabra. Yo no filtré los audios, yo perdí el teléfono hace dos semanas. Seguramente alguien los sacó de ahí porque el audio ese estaba en la galería de música”, barajó.
Autoridades al tanto
Respecto de las autoridades partidarias y del resto de los legisladores, como Natalia Gracianía, aseveró que todos estaban al tanto de la maniobra con fondos públicos. “Sobre toda esta situación yo tuve una reunión con el vicepresidente Julio Mercado, que renunció hace como dos semanas; también con el presidente de Republicanos, con un abogado del partido y un integrante de la comisión. Se los comenté y les dije si ellos estaban al tanto de que Pauli nos pedía el desarraigo. Dijeron que no y que se iban a comunicar con él, con Coto y con Gracianía. Trataron de hablar pero hicieron oídos sordos y no llegamos a ninguna solución. Yo realmente no le podía pasar 500 mil pesos por mes”, planteó.
“Coto sabía muy bien de esto y Natalia Gracianía también sabía muy bien de esto y de las computadoras. Del tema desarraigo obviamente que sabían”, subrayó.
El otro desvío
El puntero dio detalles de lo ocurrido con una serie de computadoras que eran patrimonio del Ministerio de Trabajo e iban a ser usadas para el streaming del partido, pero fueron donadas a comisarías de Ushuaia, abriendo el interrogante sobre la legalidad de la donación de bienes del Estado.
“En esa reunión donde estaba el vicepresidente del partido, una de las cosas por las que renuncia Julio Mercado es por este audio y por la puesta a dedo del concuñado de Pauli, que es el actual delegado de Migraciones Luis Miguel Rodríguez, actual candidato a diputado. Renunció por todas estas irregularidades y porque se armó un escándalo dentro del partido por las computadoras”, dijo.
Detalló que “Miguel Rodríguez pidió una donación al Ministerio de Trabajo de Nación donde está Porfirio, que a su vez es el presidente del partido Republicanos. Le pide la donación de unas computadoras que estaban en desuso para mandar a distintas comisarías. Miguel Rodríguez tenía un amigo policía que también pertenece a La Libertad Avanza y le pide que vayan uniformados y con una nota pidiendo las computadoras para ser donadas a la institución”.
Aclaró que “esas computadoras no tenían el fin de ser donadas. Eran para hacer streaming en la calle Tolhuin, donde yo estuve trabajando arreglando las paredes. A este policía los jefes le empiezan a preguntar dónde están las computadoras que fue a retirar, ese señor se comunica con Miguel Rodríguez, que se hizo el desentendido, hasta que escribió en el grupo de whatsapp de La Libertad Avanza este policía, diciendo que lo estaban haciendo quedar mal con los jefes y que corría en riesgo su puesto de trabajo, porque había puesto la cara. Pidió que por favor donen las computadoras porque él había puesto la firma. A raíz de esto a Miguel Rodríguez no le queda otra que entregar esas computadoras a distintas comisarías de Ushuaia”.
Un tercio del sueldo
Volviendo sobre los retornos, Correa estimó que el desarraigo implica un tercio de sus ingresos, que en total no llegan al millón y medio. “Por la categoría 20 cobro 800 mil pesos, un poquito más, pero no llega a los 900 mil. A eso se suman los 500 mil del desarraigo. En total era un millón y medio, pero sin el desarraigo es mucho el dinero y yo se lo planteé porque tenía problemas familiares y quería ayudar a mi hijo. Le di una cantidad de alternativas que podíamos hacer para el partido para recaudar fondos, como la venta de empanadas que sale en el audio. En su momento le dije de hacer sorrentinos de pollo, y de ahí iba a haber para ayudar a la gente, pero en ningún momento lo hicieron”, indicó.
La triangulación
Correa agregó detalles sobre la triangulación para convertir fondos públicos en fondos de uso partidario. Explicó que no hay transferencias a Santiago Pauli porque “él se cubría al no exponerse con su cuenta, sino que le transfería a otro asesor del Congreso de él que vive en Río Grande”, reveló de Martín Agüero, que tampoco estaría cumpliendo las funciones para las que fue designado.
“Cuando él (Pauli) me reclamó que yo no le había pasado un mes, cuando se lo logro pasar le mandé el comprobante a él. Le mandé como dos o tres comprobantes a Santiago de la transferencia por el desarraigo que le había transferido a la otra persona. El que recaudaba esa plata era Martín (Agüero)”, acusó.
Preguntado acerca de si conoce otros asesores en la misma situación, afirmó que son varios. “Son tres más conmigo. Yo fui el primero que le dije que no, porque no podía pagarle, otra es una chica que se llama Gisela, que es miembro de la iglesia de Pauli; después está Fabián, Martín y yo. Creo que hay otra más pero no recuerdo el nombre”, dijo.
Iglesia salpicada
Correa se mostró preocupado por la imagen de la iglesia evangélica ante este escándalo, a la que pertenecen la mayoría de los referentes de La Libertad Avanza. “Esto lamentablemente ensucia a los fieles de la iglesia, no a todos, pero ensucia a las iglesias evangélicas todo esto. Recordemos que (Pauli) es hijo de un pastor, que supuestamente es un hombre de fe, un hombre de palabra, pero no es de palabra. Santiago Pauli es un mentiroso”, manifestó.
En medio de la campaña
Finalmente, se le preguntó por qué audios que se grabaron en junio aparecen en el último tramo de la campaña, y dijo que “se desayunó” con la filtración. “No es verdad que uno usa estos audios para beneficiar a algún partido. En mi caso no es así, porque yo me desayuné igual que los periodistas. Yo digo la verdad y lo que me pasó. Obviamente que me van a dar de baja en la Legislatura, eso está cantado, pero ahí va a demostrar que tampoco tiene palabra Coto”, concluyó.

