El profesor de educación física; Fernando Cobián compartió su experiencia en la organización de eventos de handball en Río Grande, incluyendo su participación en el Arena 1000 en Viedma, la Fiesta de los Lagos en Calafate y la Copa Argentina en San Juan donde destacó el desarrollo de las categorías inferiores y la importancia de la inclusión en el deporte ya que son claves para el crecimiento de esta disciplina en la provincia de Tierra del Fuego.
Río Grande.- Fernando Cobián, profesor de educación física y responsable de las Escuelas de Handball en Río Grande, compartió su visión sobre el crecimiento del handball en Tierra del Fuego con un enfoque en la formación de las categorías inferiores, donde está trabajando arduamente para revitalizar esta disciplina en la ciudad y provincia, organizando eventos y promoviendo la participación de las y los jóvenes en competencias de alto nivel.
Un comienzo intenso en la ciudad de Río Grande
El año comenzó de manera intensa para Cobián y su equipo, quienes se prepararon desde mediados de noviembre del 2024 para la preselección de jóvenes talentos en handball. “Empezamos con entrenamiento de preselección con chicos de Río Grande y Ushuaia, y fue un proceso intensísimo hasta que logramos una invitación para participar en un Arena 1000 en la ciudad de Viedma, comentó Cobián. Este evento, organizado por la Confederación Argentina de Handball, fue crucial para clasificar a los equipos para la Copa Argentina del año siguiente.
El Arena 1000 en Viedma fue una oportunidad única para los jóvenes deportistas de Tierra del Fuego. “La localidad más cercana que nos tocaba era Viedma, y la verdad que no nos decepcionó. El nivel de competencia fue impresionante, y la hospitalidad de la gente fue excepcional”, destacó Cobián. Este torneo no solo permitió a los chicos competir, sino que también les brindó la oportunidad de medirse con los mejores en el ámbito del Beach Handball, una modalidad que ha ganado popularidad en los últimos años.
Desafíos y logros en el handball a través de los años
Cobián recordó los desafíos que enfrentaron al principio de su carrera en el handball en la región. “Recuerdo cuando comenzamos en el gimnasio de la Escuela Nº 21, donde las condiciones eran difíciles. A veces teníamos que entrenar con frío, lluvia o nieve. Pero eso no nos detuvo”, explicó. Con el tiempo, encontraron un galpón semiabandonado donde pudieron establecer un espacio adecuado para entrenar, lo que marcó un hito en el desarrollo del handball en la ciudad y provincia.
El esfuerzo valió la pena, ya que el equipo logró clasificar en el Arena 1000, obteniendo un tercer puesto tanto en la categoría masculina como femenina. “Fue un gran logro para nosotros, y nos abrieron la puerta para participar como invitados en la Copa Argentina en San Juan”, expresó Cobián con entusiasmo. Este evento, que se llevó a cabo a miles de kilómetros de distancia, representó una gran oportunidad para los jóvenes deportistas de mostrar su talento a nivel nacional.
Fiesta de los Lagos en Calafate
Antes de participar en la Copa Argentina, el equipo de handball que conduce Cobián tuvo la oportunidad de competir en la Fiesta de los Lagos en Calafate. “Este evento es muy importante en la región, ya que reúne a diferentes disciplinas deportivas. El año pasado salimos campeones, y este año repetimos el éxito, ganando tanto en masculino como en femenino”, comentó. La participación en este tipo de eventos no solo fortalece la competitividad del equipo, sino que también permite a los jóvenes deportistas vivir experiencias enriquecedoras y hacer nuevos amigos.
La importancia del semillero en la provincia de Tierra del Fuego
Cobián enfatizó la necesidad de trabajar en el desarrollo de un semillero para asegurar el futuro del handball en las tres ciudades fueguinas. “Es fundamental que los chicos tengan la oportunidad de practicar y competir desde temprana edad.
Estamos trabajando en la creación de escuelitas de handball para niños de entre 8 y 12 años, y hemos logrado establecer varios espacios de mini handball en colaboración con otros clubes”, explicó. Este enfoque en la formación de las categorías inferiores es esencial para garantizar un recambio generacional en el deporte.
“Queremos que los chicos elijan el handball como su disciplina principal. La idea es que, en lugar de decir ‘no puedo porque tengo fútbol’, sea al revés: ‘no puedo porque tengo handball’. Esa es nuestra meta”, afirmó Cobián. Para lograrlo, es necesario ofrecer un entorno atractivo y competitivo que motive a los jóvenes a involucrarse en el deporte.
Colaboración y apoyo del gobierno de la provincia
El éxito de las iniciativas de Cobián no sería posible sin el apoyo de la comunidad. “Hemos recibido ayuda de la Secretaría de Deportes de la provincia, así como de comercios y padres que han colaborado con los costos de los viajes y la logística”, comentó. Este apoyo ha sido crucial para permitir que los jóvenes deportistas participen en eventos de gran envergadura, como la Copa Argentina.
Cobián también destacó la importancia de la capacitación de árbitros y entrenadores para mejorar la calidad del deporte en la provincia. “Estamos trabajando en la formación de árbitros jóvenes para que puedan arbitrar los torneos de mini handball e infantiles. Esto no solo ayuda a la organización de los eventos, sino que también brinda oportunidades a los jóvenes para involucrarse en el deporte desde diferentes perspectivas”, explicó.
Mirando hacia el futuro del handball en Tierra del Fuego y a nivel nacional
Con la mirada puesta en el futuro, Cobián expresó su deseo de seguir promoviendo el handball en Tierra del Fuego y de llevar a los jóvenes a competir en eventos nacionales. “Nuestro objetivo es participar en los Juegos Evita y en otros torneos a nivel nacional. Queremos que nuestros chicos tengan la oportunidad de representar a la provincia y demostrar su talento”, concluyó.
El trabajo de Fernando Cobián y su equipo en la promoción del handball en Tierra del Fuego es un ejemplo de cómo la pasión y el compromiso pueden transformar una disciplina deportiva. Con un enfoque en la inclusión, la formación de jóvenes talentos y la colaboración con la comunidad, el handball en la región está en un camino de crecimiento y éxito.
