Con una destacada actuación en el campeonato de la Confederación Argentina de Futbol de Salón (CAFS), la selección C-20 de Río Grande se posiciona como uno de los equipos más competitivos del torneo, gracias al esfuerzo y dedicación de sus jugadores y cuerpo técnico.
Comodoro Rivadavia.- La ciudad de Comodoro Rivadavia se ha convertido en el epicentro del fútbol de salón en Argentina, al albergar el nacional de clubes C-20, y en este contexto, la selección de Río Grande ha demostrado su valía en el campo de juego, logrando resultados significativos que la colocan en una posición privilegiada en la competencia. Pablo Pawlizki, secretario de la federación fueguina de fútbol de salón, compartió detalles sobre el desempeño del equipo y las expectativas para los próximos encuentros.
Un inicio complicado pero esperanzador
El torneo comenzó con un partido desafiante contra San Rafael, donde la selección de Río Grande se enfrentó a un rival fuerte. El primer tiempo culminó en un empate 2 a 2, reflejando la intensidad y competitividad del encuentro. A pesar de este tropiezo inicial, Pawlizki destacó la resiliencia de los jugadores, quienes se levantaron con ánimo y determinación para enfrentar el siguiente desafío. “Fue un partido muy duro, pero los chicos mostraron carácter y ganas de seguir adelante”, comentó Pawlizki, subrayando la importancia de mantener la moral alta a pesar de las adversidades.
Un segundo partido prometedor
El segundo encuentro fue un claro ejemplo de la capacidad del equipo para recuperarse. Con un primer tiempo que finalizó 0 a 0, ambos equipos mostraron un juego defensivo sólido. Sin embargo, en el segundo tiempo, la selección de Río Grande encontró su ritmo y, a los 8 minutos y 25 segundos, se abrió el arco para el equipo. La actuación estelar de Juan Muellady, quien anotó tres goles, y Tobías Riquelme, quien sumó un gol más, fue fundamental para asegurar la victoria. “El segundo tiempo fue donde realmente mostramos nuestro potencial. Los chicos se soltaron y jugaron con confianza”, destacó Pawlizki, quien también mencionó la importancia de la estrategia y el trabajo en equipo para lograr estos resultados.
La importancia de la diferencia de goles
A medida que avanzaba el torneo, la competencia se tornó más reñida. La selección de Río Grande se encontró en una situación donde la diferencia de goles se convirtió en un factor decisivo. A pesar de tener la misma cantidad de puntos que sus rivales, la diferencia de goles favoreció al equipo, permitiéndoles avanzar a la siguiente fase del torneo. Pawlizki enfatizó la importancia de cada gol y cómo estos pueden marcar la diferencia en competencias de alto nivel. “Cada gol cuenta, y en un torneo tan competitivo, la diferencia de goles puede ser el factor que determine quién avanza y quién se queda atrás”, explicó.
Expectativas para los cuartos de final
Con la clasificación a los cuartos de final asegurada, la selección de Río Grande se preparó para enfrentar nuevos desafíos donde se llevaron a cabo el sorteo que determinó el próximo rival del equipo. Pawlizki expresó su confianza en el desempeño del equipo, resaltando el compromiso y la dedicación de los jugadores, así como el apoyo incondicional de la afición. “Estamos listos para lo que venga. Los chicos han trabajado duro y están motivados para seguir avanzando en el torneo”, afirmó.
El apoyo de toda la comunidad riograndense
El secretario de la federación también hizo hincapié en la importancia del apoyo de la comunidad y los seguidores del equipo que, a través de las redes sociales, los aficionados han podido seguir de cerca cada partido, alentando a la selección de Río Grande en cada jugada. Este respaldo fue fundamental para motivar a los jugadores y crear un ambiente positivo en el torneo. “El apoyo de la gente es invaluable. Sabemos que no estamos solos en esto, y eso nos da una fuerza extra en el campo de juego”, comentó Pawlizki, quien también agradeció a los seguidores por su constante aliento.
El desafío de la competencia
Pawlizki también reflexionó sobre el nivel de competencia en el torneo. “Cada equipo aquí es fuerte y ha llegado hasta aquí por méritos propios. No podemos subestimar a nadie”, advirtió. La selección de Río Grande ha tenido que enfrentarse a rivales que han demostrado ser dignos competidores, lo que ha llevado al equipo a elevar su nivel de juego. “Cada partido es una oportunidad para aprender y mejorar. Estamos aquí para competir y dar lo mejor de nosotros”, añadió.
La importancia del trabajo en equipo
Uno de los aspectos que Pawlizki destacó fue la cohesión del equipo. “El fútbol de salón es un deporte que requiere un gran trabajo en equipo. No se trata solo de habilidades individuales, sino de cómo se complementan los jugadores en el campo de juego”, explicó. La química entre los jugadores ha sido evidente en sus actuaciones, y esto ha sido clave para su éxito en el torneo. “Hemos trabajado en la comunicación y en entendernos dentro del campo. Eso se ha visto reflejado en los resultados”, concluyó.
La participación de la selección C-20 de Río Grande en el nacional de clubes en Comodoro Rivadavia ha sido un viaje lleno de emociones, desafíos y logros. Con un equipo que ha demostrado su capacidad para superar adversidades y un cuerpo técnico comprometido, las expectativas son altas para los próximos encuentros. La comunidad de Río Grande sigue unida, apoyando a su selección en cada paso del camino hacia la gloria en el fútbol de salón. “Vamos a seguir luchando y dando lo mejor de nosotros. Estamos aquí para dejar una huella”, finalizó Pawlizki, con la mirada puesta en el futuro y en el deseo de alcanzar grandes logros en el torneo.