Villegas llamó al Estado a poner fin a las desigualdades en educación

El legislador del MPF Pablo Villegas presentó el proyecto que busca reglamentar las desobligaciones docentes, con el fin de que sean comunicadas como cualquier paro a las autoridades competentes o, de lo contrario, se declaren ilegales. Llamó al Estado, incluido el Poder Legislativo, a poner fin con las desigualdades entre los chicos que concurren a colegios de gestión privada, que no ven interrumpidas sus horas de aprendizaje, y los que concurren a la escuela pública, que viven “en zozobra, con cuatro o cinco desobligaciones por semana”. Consideró necesaria la intervención de la Legislatura, porque el gobierno tiene herramientas legales a su disposición y no las utiliza, frente al uso “abusivo” de medidas de fuerza de parte del SUTEF. 

Río Grande. –  El legislador del MPF Pablo Villegas presentó el jueves pasado, junto con su par Damián Löffler, el proyecto de ley que busca reglamentar la desobligaciones docentes, “cumpliendo con la palabra empeñada”, dijo, dado que había adelantado esta iniciativa por los medios de comunicación. 

“Dijimos que había que ponerle un límite a todo el marco que generan las desobligaciones convocadas por el SUTEF, con la mirada distraída y cómplice del gobierno de la provincia, que termina perjudicando a los chicos. En el proyecto de ley se establecen las reglas de juego a las cuales se deben ajustar tanto las autoridades del sindicato como las autoridades del Ministerio de Educación y del Ministerio de Trabajo de la provincia”, indicó.

Explicó que “las desobligaciones son un retiro de los docentes de su obligación de dar clases, manteniéndose en las instalaciones educativas, y son paros encubiertos por horas determinadas. Como tales tienen que ajustarse al marco legal vigente, tienen que ser notificados a la autoridad administrativa con competencia laboral, tienen que ser notificados a la patronal también, para que a partir de ahí se lleven a cabo las medidas que corresponden frente a paros de estas características”.

“Cuando esas desobligaciones convocadas por el gremio no sean notificadas como prevé este proyecto de ley, nosotros entendemos que deben considerarse ilegales y que la autoridad administrativa del Ministerio de Trabajo tiene que dejarse de hacer la distraída y declarar la ilegalidad. Esto tiene consecuencias legales que prevé el sistema jurídico vigente, tanto para el sindicato y sus autoridades, como para las autoridades del Ministerio de Educación, las autoridades del Ministerio de Trabajo, y los docentes”, advirtió.

“De eso se trata el proyecto y dejamos siempre en claro que el gran responsable es el gobierno de la provincia, que no ha querido o no ha sabido resolver el conflicto con el SUTEF. El gobierno tiene que dejar de ser cómplice y hacerse el distraído frente a estas famosas desobligaciones, que son un ejercicio abusivo de la función sindical que lleva a cabo el SUTEF. Esto no puede quedar impune y debemos tener reglas de juego claras frente a un fenómeno que es exclusivamente local, porque esas desobligaciones existen nada más que en Tierra del Fuego”, subrayó.

 

Alumnos de primera y de segunda

 

El legislador planteó que “el Estado tiene la obligación de garantizar igualdad de trato, igualdad de oportunidades y de garantizar el goce efectivo y oportuno de los derechos que reconoce la Constitución. No hay derechos absolutos, y una asociación sindical no puede neutralizar el ejercicio de otro derecho, como es el derecho a aprender”. 

“Espero que esta propuesta legislativa pueda ser debatida en un ambiente democrático, de respeto a las opiniones de todos, porque en Tierra del Fuego se ha marcado una desigualdad estructural a partir de estas desobligaciones: tenemos alumnos de primera y de segunda categoría, porque hay chicos con posibilidad de educarse sin estas interrupciones en las escuelas de gestión privada; y los chicos que van a las escuelas públicas tienen otra realidad”, diferenció. 

“Esta desigualdad no puede ser ignorada por los poderes del Estado, incluido el Poder Legislativo. No todos tienen posibilidad de tener padres con ingresos salariales que les permitan costear una educación privada, y las desobligaciones no es que se hacen una vez cada 30 días, sino que se hacen cuatro o cinco por semana. Toda esa zozobra les quita la oportunidad de aprender a los pibes y los más vulnerables son los más afectados. El Estado tiene obligación de cambiar estas desigualdades y tiene herramientas para hacerlo. Yo estoy proponiendo una junto con el legislador Löffler y espero que sea un punto de partida para generar el debate y revertir las desobligaciones del modo que se vienen desarrollando”, confió.

Respecto del eco de esta propuesta en sus pares, dijo que “el viernes estuve hablando con algunos legisladores, me han dicho que estuvieron leyendo el proyecto y uno después estará a las resultas del juego de las mayorías y las minorías dentro de la Legislatura. Uno no puede hacerse el distraído como lo hace el gobernador o el Ministro de Educación, que dan declaraciones públicas muy rimbombantes pero, al momento de los bifes, miran para el costado y no hacen lo que tienen que hacer”, cuestionó.

“El propio Ministro de Educación dice que las desobligaciones debieran acabarse, que únicamente existen en Tierra del Fuego y que para él son ilegales, pero no hace lo que prevé el sistema jurídico vigente. No sé hasta dónde no están generando perjuicio fiscal, pero es una arista en la que no me interesa incursionar al menos por ahora. Lo fundamental es garantizarles clases a los chicos, porque hay un ejercicio abusivo por parte del SUTEF y hay una complicidad y una impericia manifiesta del gobierno de la provincia. Como legisladores tenemos que aportar para cambiar esa realidad”, enfatizó.

Aclaró que este proyecto “no es un Boca-River con el SUTEF, yo entiendo que ellos defiendan sus intereses a través de la acción sindical, pero tiene que ser siempre dentro de un marco de razonabilidad y dentro del marco de la ley. Yo soy un convencido de que le están mintiendo a los docentes diciéndoles que las desobligaciones son legales, porque del modo que las hacen no son legales; y están haciendo un ejercicio abusivo de los derechos que les reconoce la Constitución”, remarcó. 

 

Co-gobierno con el SUTEF

 

El legislador atribuyó la complicidad del gobierno a una suerte de co-gobierno con el SUTEF, dado que el Ministerio de Educación le consultaría al gremio cada medida que va a tomar. Se comprometió a subir a sus redes la estructura política y orgánica del Ministerio de Educación, porque “la última que me pasaron está prevista en un decreto de 2024 y realmente es una mega estructura de funcionarios, de cargos y cargos. Hay algunos con unos nombres que uno no sabe si reír o llorar. Si frente a semejante mega estructura no se puede garantizar el pago de salarios ni de los aguinaldos en tiempo y forma, lo que falla es la gestión de gobierno. Los responsables son el gobernador por un lado y las autoridades políticas del Ministerio de Educación”, puntualizó.

“La estructura del Ministerio de Educación es escandalosa y pareciera que hay un co-gobierno con el SUTEF, porque me dicen que antes de ejecutar una acción del Ministerio le consultan a los dirigentes del SUTEF. Me pregunto dónde está el ejercicio de la autoridad de un ministro, de un gobernador, frente a un sindicato que defiende intereses sectoriales. Está dentro del marco de sus atribuciones defender intereses sectoriales, el problema lo tenemos en el gobierno, porque no ejerce el poder y la autoridad con autonomía y firmeza, para que las reglas de juego se respeten”, expresó. 

“No podemos naturalizar que un ministro diga que le pidió a los docentes que dejen sin efecto las medidas, pero luego diga que sigue apostando al diálogo y en medio no hace nada ni ejecuta las herramientas legales que tienen a su mano para garantizar el derecho a la educación”, concluyó.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.