La ministra de Trabajo Sonia Castiglione cargó contra la política nacional, que está destruyendo las economías regionales y la industria en general, tras conocerse el informe del Centro de Economía Política Argentina, que marca una caída de más de mil puestos de trabajo entre febrero y mayo de este año en Tierra del Fuego. Aseguró que no sorprenden los números y que la cifra es más alta todavía si se contabilizan los despidos entre julio y septiembre. Entre noviembre de 2023 y junio de 2025, el mismo informe habla de un total acumulado de 10.190 puestos menos y no hay salida porque “el mercado laboral está paralizado”. Salvo el pedido a los argentinos de que hagan un “esfuerzo”, no hay “ninguna palabra del gobierno nacional de hacia dónde vamos, todo tiene que ver con el equilibrio fiscal, pero se necesita generar economía, empleo, y en nombre de la libre competencia del mercado se está haciendo pelota la industria nacional”, sentenció.
Río Grande. – La ministra de Trabajo, Sonia Castiglione, cuestionó con dureza las políticas del gobierno nacional que “están haciendo pelota la industria nacional” y provocando una caída constante de los puestos de trabajo.
Por FM La Isla se la consultó sobre el informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), que señala que Tierra del Fuego experimentó un deterioro significativo en su mercado laboral entre febrero y mayo de 2025, perdiendo 1.042 empleos registrados en el sector privado en ese período, según datos que coinciden con los de la consultora Politikón. La provincia se suma a otras regiones con alta retracción y su evolución se enmarca en una tendencia nacional de pérdida de empleo en los primeros 18 meses de la gestión de Milei.
“Este informe hace un relevamiento hasta fines de mayo y la verdad es que no nos sorprende, porque ya veníamos hablando en otras oportunidades de esto. La situación podría agravarse con los relevamientos de junio a agosto, por la incidencia de la actividad del sector textil, porque hay empresas que han desvinculado gente; tampoco tuvimos un invierno muy bueno, y a esto se suma el enfriamiento de la economía, que hace que no haya circulante en la calle y esto repercute directamente en el empleo”, dijo.
Recordó que “un sector de La Libertad Avanza había hablado del crecimiento en la industria y puede ser que en los números sea así, contrastado con el año pasado, pero el tema son las razones, porque hay un acuerdo desde mayo entre la UOM y AFARTE para que no haya desvinculaciones hasta el 31 de diciembre”.
La cifra acumulada es alarmante, porque en total la caída el empleo es de 10.190 puestos entre noviembre de 2023, cuando había 79.760 registrados, y junio de 2025, con 69.570. “Es un porcentaje muy alto, quizás varias de esas personas han tenido una reconversión en algún tipo de emprendimiento si recibieron una indemnización, pero son los menos. La gran mayoría sigue en la búsqueda de empleo y la virulencia más importante fue durante el primer semestre del año pasado. Entre mayo y septiembre se empezaron a notar fuertemente las medidas del gobierno nacional vinculadas con la paralización de obra pública, hubo paritarias que no se homologaban porque superaban lo establecido por el gobierno nacional, más una serie de variables que incidieron en una caída muy violenta en cantidad de gente y en corto tiempo”, expresó.
Preocupa lo sucedido y más todavía lo que viene, porque semana a semana se suman a la lista más desocupados. “Ese número es más que preocupante y es el que nosotros vemos en el Ministerio, porque tenemos acuerdos de desvinculación todas las semanas. Es preocupante porque esto sigue. El mercado no está demandando trabajo y lo que queda es fomentar la inversión privada con distintas herramientas. Esto lo viene haciendo el Banco Tierra del Fuego, el FOGADEF, la Secretaría de Desarrollo Productivo y Pymes, el área de Economía. Está muy complicado el acceso al crédito por el aumento de tasas y hay una realidad que el gobierno nacional no ve”, enfatizó.
“No hay ningún tipo de mensaje, salvo el de que hay que hacer un esfuerzo. Hoy por hoy no hay ninguna palabra del gobierno nacional de hacia dónde vamos. Todo tiene que ver con el equilibrio fiscal, pero se necesita generar economía, empleo, y en nombre de la libre competencia del mercado se está haciendo pelota la industria nacional”, disparó.
Todas las economías regionales están afectadas: “Están llegando peras de China que impactan a los productores de Río Negro, yerba mate de Paraguay por lo cual no le compran a los productores de Misiones, en la zona norte ingresa carne vacuna de Brasil y esta es la realidad de las economías regionales. Se llenan la boca hablando del RIGI y de las inversiones, pero llevamos un año y medio y no se ve ningún derrame en beneficio de la economía de la gente y de las empresas”, cuestionó.
“El 80% de los sectores económicos no está bien, han perdido competitividad, han perdido posibilidad de inversión, capacidad productiva y clientes. Con el levantamiento de la barrera sanitaria, el sector productivo de Patagonia perdió clientes”, remarcó.
Pocas alternativas
Frente a este escenario la capacidad de maniobra del gobierno es muy limitada, pero algunas alternativas existen y dependen de la decisión que debe tomar la Legislatura respecto de la salmonicultura. “Desde el inicio de la gestión Melella venimos trabajando para encontrar inversiones en el sector de hidrocarburos, y también tenemos que mirar la pesca. Ahora se está tratando el proyecto de acuicultura, se podría generar una genética en ovas fueguina, exportar alevines, y esto se hace dentro de un sistema absolutamente controlado y es más que amigable con el medioambiente. La acuicultura también es la posibilidad de generar actividades para potenciar la cría de mejillones, poder potenciar el tema de erizos, el tema de vieiras. Hay una multiplicidad de cosas que hacen a la acuicultura, no son solamente las grandes granjas que salen en todas las fotos. Esta es una posibilidad de economía regional”, aseguró.
“Nosotros tenemos condiciones fitosanitarias muy interesantes para este segmento, por eso podemos pensar en una genética propia en función de alevines o de ovas de algunas especies y es muy factible. Esto se hace en piletas, en un ambiente controlado”, subrayó.
“También tenemos la pesca comercial de altura y hay áreas que todavía no están consignadas, que se complementa con la pesca en aguas jurisdiccionales. Hay otras economías regionales que no mueven la exportación a gran escala, como la explotación de turba, y hay posibilidad de generar valor agregado en Tierra del Fuego para no llevarla como insumo. Hay actividades vinculadas con la producción de alimentos en general, con valor agregado sobre carnes. En algún momento cuando se logró la prórroga del subrégimen y se creó el FAMP, los ejes de desarrollo estaban absolutamente claros y estaba prevista la inversión de las empresas en estas actividades económicas, producción de alimentos, hidrocarburos, pesca y energía”, sostuvo, si bien posteriormente muchos de los proyectos mutaron a inversiones inmobiliarias.
Además la migración
La ministra expuso una particularidad de la provincia que, ya complicada con los propios, tiene que atender las necesidades de los recién llegados. “En la provincia tenemos una migración casi permanente y sostenida durante mucho tiempo. Hay necesidad de generar puestos de trabajo para el crecimiento vegetativo y para la gente que viene de distintas partes del país. Hoy tenemos la industria y el turismo sujetos a vaivenes nacionales e internacionales y por eso es tan importante desarrollar las actividades genuinas de la economía regional”, indicó.
Desempleo generalizado
“Claramente tenemos una situación que venimos pasando desde diciembre de 2023 hasta acá, con enfriamiento de la economía, caída del empleo y caída de las ventas en general. Esto sucede en todo el país, porque Córdoba está teniendo un problema tremendo con las automotrices y quedaron desvinculadas más de 3.500 personas del año pasado hasta ahora. El empleo está cayendo en todas las provincias y, cuando esto es así, es porque lo que está paralizado es el mercado laboral. Cuando se despide de a 15, de a 20 ó de a 100, no se puede absorber eso y el mercado laboral es lo que está resentido. Esto le pasa a todas las provincias”, aseguró.
“Hay pymes del sector metalúrgico que han cerrado y todas las provincias estamos haciendo esfuerzos para poder sostener el empleo y la actividad, tratando de que las empresas no cierren, generando acceso al crédito, por ejemplo; pero también hay limitantes del Banco Central, los encajes están condicionados y no le permiten a los bancos usar toda la capacidad de crédito que tienen”, concluyó.

