El Dr. Carlos Sánchez Posleman explicó los motivos de la decisión de la Clínica San Jorge de no atender a los cónyuges de titulares de OSEF, y señaló que se debe a la baja que dio la obra social a todos aquellos que cuentan con otra obra social privada o sindical. Para seguir utilizando la OSEF tendrán que darse de alta como adherentes y aportar el 1,5% de su salario, porque así lo dispone la ley de financiamiento que aprobó la Legislatura. Además, aseguró que “al día de hoy la obra social sigue con los mismos ingresos”, porque no pueden contar con el salvataje del Puerto. Otro frente de tormenta son los jubilados que no aportaron en su vida activa a la obra social y ahora deberían pagar el equivalente a 20 años de aportes. Esto incluye a los pasivos bancarios, empleados de la DPE, de la Justicia y de otros entes que cuyos trabajadores tienen una prepaga.
Río Grande. – El titular de la Clínica San Jorge, Dr. Carlos Sánchez Posleman, explicó las razones para no atender más a los cónyuges de afiliados titulares de OSEF, en razón de la ley que sancionó la Legislatura. La norma dispone que, en caso de contar con otra obra social, deberán darse de alta como adherentes y aportar el 1.5%, caso contrario quedan fuera de la cobertura de la entidad estatal.
La situación derivó en reclamos de los afiliados y no fue difundido ampliamente el nuevo marco normativo, hasta que se encontraron con que, para ser atendidos, los cónyuges debían pagar como particulares. “La ley prevé que aquellos cónyuges que tienen otra cobertura, si quieren seguir manteniendo la obra social OSEF, tienen que aportar el 1.5% de su salario, como un adherente más. Esto es solamente para los cónyuges, no para los hijos”, indicó a FM Espectaculos.
La ley entiende que “aquel que tiene doble cobertura significa que tiene capacidad económica, aporta a otra obra social y no aporta a la OSEF. La decisión que tomó la OSEF fue aplicar la ley, dar de baja a todos, la información no fue la suficiente para que le llegue a todo el mundo y hay veces que van a la consulta y tienen que pagar como particulares, porque cuando nosotros ingresamos al sistema para pedir la autorización, el afiliado figura como dado de baja”, explicó.
Lo que deben hacer los cónyuges a partir de esta norma es “un trámite ante la obra social para darse de alta nuevamente, con el aporte correspondiente que antes no hacían. Pueden tener las dos obras sociales, pero tienen que aportar el 1.5% a la OSEF. Yo creo que hubo un problema grave de comunicación, que llevó a este tipo de confusiones”, consideró.
Jubilados sin cobertura
Por otra parte, se abrió otro frente de tormenta con los jubilados bancarios y de otros entes que en su vida activa tuvieron una prepaga, porque de acuerdo a la norma deberían aportar el equivalente a 20 años para seguir teniendo OSEF. “Hay que esperar la reglamentación, porque la ley dice que deben tener 20 años de aportes y es inviable que una persona pueda pagar 20 años de aportes de un día para el otro. En su momento lo que yo entendí del espíritu de la ley es que, si no tenían los 20 años de aportes y querían seguir con la obra social, tenían que pagar el 3% más el 9% que aportaba la patronal, que se lo llevaron a otro ente. La gran masa crítica eran los empleados bancarios, que tienen una cobertura de un prepago durante su vida activa y, cuando se jubilan, algunos no pueden sostener ese prepago y deciden ir a OSEF. La ley lo que dice ahora es que tienen que poner 20 años de aportes, lo cual es prácticamente inviable. Se van a quedar sin salud y de alguna manera hay que resolver eso”, planteó.
No descartó que este grupo de jubilados decida optar por la vía judicial. “Según lo interpreté yo en su momento, el afiliado empezaba a pagar este 9% a la obra social más el 3% que tenía por obligación, que en definitiva es mucho menos que la diferencia de mantener un prepago. La ley salió de esa manera y, por lo que estuve hablando, es difícil que la reglamentación pueda cambiar la letra chica de la ley. No sé cómo irán a hacer y si intervendrá la Justicia”, dijo.
El médico estimó que “en noviembre seguramente se va a tratar de nuevo la ley, porque no se resolvieron las situaciones de fondo” y se han generado estas nuevas controversias.
Sin fondos del Puerto
Por otro lado, el Dr. Sánchez Posleman aclaró que los fondos del Puerto no están disponibles, como preveía la ley, para ser destinados a la OSEF. “Esta ley no resolvió absolutamente nada, hubo un desgaste muy importante, pero no hay ninguna solución al desfinanciamiento de la obra social. Teóricamente iba a haber un salvataje del Puerto, que no es real, porque los dividendos que tenía el Puerto de 2024 ya los tiene comprometidos y no tienen la plata. Esa plata está comprometida y proyectada para otras inversiones y obligaciones que tienen”, afirmó.
“La realidad es que la obra social al día de hoy sigue con los mismos ingresos que en meses anteriores y con la imposibilidad de cumplir con todas sus obligaciones”, sentenció.
Aumento de aportes fundamental
De rediscutirse la ley de financiamiento, el Dr. Sánchez Posleman consideró que “el aumento de aportes es fundamental, porque la provincia no está en condiciones económicas y porque es muy caro sostener el tipo de medicina que se da acá. Un prepago que tiene un 210, no puede bancar el hospital Italiano de Buenos Aires; la obra social, con muchos menos aportes, le da el hospital Italiano. O renunciamos a algunos beneficios que tiene la obra social para con los afiliados, o se aumentan los aportes. Hay que tomar una definición, o se va a un médico de cabecera con derivación a especialistas y con prioridad en el sector público, o se cambia de prestadores de alta complejidad para derivaciones. Por suerte la minoría es la que se enferma y requiere de estos servicios, pero nadie piensa en eso. Cerca de los 80 años, que es el promedio de vida que tiene nuestra generación, la gente empieza a ver las cosas de otra manera. Yo creo que el aumento de los aportes no es bajarle el sueldo a la gente, sino que es asegurarle a la gente que su sueldo le va a alcanzar para cuidar su salud, que es el bien más importante”, subrayó.
“Todo depende de cómo lo expliquemos, porque están los que hablan para la tribuna y dicen que no le van a tocar el sueldo a los trabajadores, que son su capital político. No piensan en la realidad y en lo que le interesa a la mayoría de la gente. Desgraciadamente quedan políticos que trabajan para la tribuna y así estamos”, lamentó, ante un consenso tácito de los legisladores de dejar las reformas para después de las elecciones.
Tuvo en cuenta que “el nivel de demanda es muy alto y la cobertura de la OSEF es muy superior a cualquier prepago y cualquier obra social sindical. La gente está acostumbrada a pedir todo y no hay límites en el pedido. Ahora se da mucho menos de lo que antiguamente se daba, porque había hasta pasajes para irse de vacaciones. Venimos de un estándar muy alto y por supuesto la gente se queja. Se despilfarró la plata, hoy no hay y la gente se queja por desconocimiento”, concluyó.
