Fernando Chiesa, integrante de FINNOVA, explicó la importancia de la reunión de administradores de programas antárticos latinoamericanos –RAPAL-, que se está realizando desde este lunes en Punta Arenas, Chile. Son uno de los representantes del sector privado que fueron invitados y como fundación están promoviendo la conformación de un clúster logístico antártico, que “apunta a que un conjunto de empresas puedan ofrecer servicios de calidad para facilitar la cuestión logística”, dijo. Otro de los objetivos es realizar un congreso antártico en noviembre en Ushuaia para concientizar sobre la cuestión antártica, y también proponer a Ushuaia como sede en 2026 de RAPAL. Además, sostuvo que “Punta Arenas provee 24 programas nacionales antárticos, y eso representa más de 500 millones de dólares anuales, en términos de impacto de las comunidades”.
Río Grande. – Fernando Chiesa, integrante de FINNOVA, informó sobre la participación de la fundación en la 36ª reunión de Administradores de Programas Antárticos Latinoamericanos (RAPAL), que se realiza del 22 al 25 de septiembre en Punta Arenas, y cuenta con la presencia de delegaciones de países como Chile, Uruguay, Colombia, Argentina, Brasil, Perú, Venezuela y Ecuador.
Se trata de un foro de coordinación logística, científica y medioambiental en el ámbito antártico. “Hoy en día el 90% del turismo internacional antártico pasa por Ushuaia, sin embargo, nosotros proveemos solamente un programa nacional antártico mientras que Punta Arenas provee 24 programas nacionales antárticos, y eso representa más de 500 millones de dólares anuales, en términos de impacto de las comunidades. Desde FINNOVA nos interesa la cuestión antártica porque tiene el potencial de transformar la isla”, dijo en el programa ‘Buscando el Equilibrio’ por Radio Provincia.
“La RAPAL se creó para fortalecer la integración regional y para que América Latina tenga una voz más activa en la gobernanza antártica, frente al avance de los países del norte. FINNOVA fue invitada y estamos presentando nuestras iniciativas sobre un análisis de capacidades y servicios que estamos realizando en Ushuaia, para entender por qué hoy Ushuaia no es elegida como Punta Arenas para proveer logísticamente a los programas antárticos”, explicó.
“Estamos llevando adelante la conformación de un clúster logístico antártico, que apunta a que un conjunto de empresas puedan ofrecer servicios de calidad para facilitar la cuestión logística. También queremos realizar un congreso antártico en noviembre en Ushuaia para concientizar sobre la cuestión antártica. Además estamos haciendo campaña para proponer a Ushuaia como sede en 2026 de RAPAL”, detalló de los objetivos de corto plazo.
Recordó que “el Tratado Antártico se conformó con el objetivo de que la exploración en la Antártida sea en el marco de la ciencia y de la paz, que no haya presencia militar más allá de la logística y Argentina tiene una presencia importante con la mayor cantidad de bases, pero no logramos proveer a los otros programas antárticos”.
“El informe preliminar del análisis de competitividad que estamos haciendo se va a presentar en el congreso. El problema principal son los costos portuarios. Los costos que tiene el Puerto de Ushuaia son enormes en comparación con otros lugares, como Punta Arenas. En Punta Arenas hay una infraestructura que es impactante, que está diseñada especialmente para proveer a los programas. Nosotros no tenemos eso y no hemos avanzado. Hablamos todo el tiempo de la base naval integrada y del polo logístico antártico pero no se ha logrado y seguimos retrocediendo en un ámbito que tiene el potencial de transformar la provincia”, expresó.
Aseguró que “la diferencia en la carga de combustible en gigantesca y se lleva más de la mitad del costo portuario. El único que tiene la capacidad para proveerlo es YPF y pone el precio que quiere. Eso hace que se alejen muchos potenciales clientes. La normativa se puede agilizar, pero los costos dependen de factores externos, lo mismo la infraestructura”.
También puso de relieve la importancia de articular entre el sector público y el privado. “En Punta Arenas hay una relación virtuosa entre el sector público y el privado. Tenemos muchas cuestiones que modificar y el primer paso es generar una reunión de actores privados que tienen ganas de ofrecer servicios de calidad y que quieren innovar. Mirgor está avanzando en la posibilidad de ofrecer vuelos privados a la Antártida, que sería un avance tremendo. El que abre camino acá, abre camino para todos y ojalá lo puedan habilitar”, manifestó.
“Hay un ecosistema que permite la mirada a largo plazo y que se mantengan políticas y acuerdos a largo plazo. DAP está trabajando hace muchísimo tiempo en los vuelos a la Antártida, le llevó tiempo lograrlo y hoy hace más de 200 vuelos. Es un ejemplo a seguir y no hay una mirada de desconfianza del Estado hacia el privado sino de alianza, y lo vieron mucho antes que nosotros”, señaló.
“Estamos 20 ó 30 años atrasados en relación a Chile en lo que es logística antártica, en términos de infraestructura, regulación, clústeres. Cualquier viaje comienza con un paso y esperamos que este sea ese paso”, deseó.
Dado que FINNOVA es una fundación que “es independiente de todas las gestiones”, confió en que al plantear RAPAL 2026 en Ushuaia “eso implique una cooperación con los diferentes niveles del Estado. Es en función de lograr un objetivo común que beneficie a la comunidad fueguina”, priorizó.
Destacó el rol de Daniel Leguizamón, que “viene hablando de esto desde hace muchísimo tiempo, en los ’90 tuvo iniciativas visionarias y tiene mucha información. Colabora dentro del equipo y es inestimable. Hoy está la maestría de Estudios Antárticos en la UNTDF y es una garantía de que esto continúe. Va a haber una nueva generación que va a estar instruida en todo esto y nos gustaría cooperar con la UNTDF y generar una beca para que los integrantes de otros programas latinoamericanos vengan a estudiar la maestría a Tierra del Fuego”, adelantó.
En materia de medioambiente, dijo que se han hecho estudios sobre la llegada de micro plásticos a la Antártida. “El 100% de la materia fecal de lobos marinos tiene micro plásticos y en gran parte provienen de las ciudades de la Patagonia. En el sistema del Tratado Antártico se ve que hoy hay un exceso de turismo, que está teniendo un impacto negativo en la fauna local. Tenemos que encontrar la forma de fomentar el desarrollo turístico, pero en armonía, para no afectar el recurso”, planteó.
“El retroceso de los hielos también es una cuestión central y la ciencia y el medioambiente son dos temas centrales en esta RAPAL”, apuntó.
Asimismo, consideró importante la integración entre ambos países. “Si se fortalecen Puerto Williams y Punta Arenas como destinos turísticos, también eso beneficia a Ushuaia y se vuelve un sistema más atractivo. Si se generan vuelos a la Antártida, para ir y volver en el día, un turista que no quería ir mucho tiempo en un crucero puede decidir venir a Ushuaia cuatro días y pasar un día en la Antártida. Eso tiene un potencial para atraer más gente. Ese nicho es el que hay que explorar y me parece muy interesante”, afirmó.
“Tenemos un sector privado dinámico y si se abre el camino para que no haya tantas trabas, las ideas van apareciendo solas”, concluyó Chiesa.


