La presidente de la convención informó ayer sobre la decisión de enviar a la comisión de Disciplina, que preside Fernando Oyarzún, el pedido de destitución del convencional Javier Branca. Fue a raíz de la presentación del partido Soberanía Popular, presidido por Rubén Hibauza, que se quedaría con la banca de acuerdo a la lista de sucesión. La comisión deberá dictaminar primero, para que el Cuerpo defina luego por mayoría agravada si Branca debe dejar el cargo para el que fue elegido, en el octavo lugar en las preferencias. Urquiza consideró que “esta situación empaña el trabajo de la convención”, tras haber recibido una gran cantidad de proyectos de particulares que demuestran el interés del vecino en la reforma de la carta orgánica. Advirtió que muchos serán desechados, porque sólo se pueden modificar los 106 incluidos en la ordenanza de convocatoria.
Río Grande.- La presidente de la convención constituyente municipal, Mónica Urquiza, decidió enviar a la comisión de Disciplina el pedido de destitución del concejal Javier Branca, presentado por el presidente del partido Soberanía Popular Rubén Hibauza. Esta fuerza política, que integró el frente Sí Ushuaia encabezado por Branca como extrapartidario, se quedaría con la banca en caso de que prospere la solicitud, de acuerdo al orden de sucesión en la lista de candidatos. Si el reemplazo es del mismo género, le correspondería asumir a Guillermo Sebastián Maller, militante de Soberanía Popular.
Por Radio Nacional Ushuaia, la mopofista precisó que el tema quedará “en manos de la comisión de Disciplina y Asuntos de Privilegio. Ya la comisión tiene su autoridad -es presidida por Fernando Oyarzún-, quien definirá la fecha de reuniones. No hay plazo para expedirse porque no está definido el tiempo. El artículo 5 del reglamento habla de estas cuestiones y dice que la Cámara puede accionar, teniendo un dictamen de la comisión, con los votos de los dos tercios de los convencionales”, para destituir a un par.
Se le consultó sobre las implicancias de la demora en esta definición, dado que, en caso de ser destituido, podrían ser impugnadas todas las votaciones que hubiera realizado Javier Branca, vinculadas con la reforma de artículos de la carta orgánica o dictámenes de comisión. “Es una situación que vamos a tener que analizar, porque todavía los convencionales no hemos tenido una reunión para analizar la situación y poder hablar con el convencional. Hablando como convencional, cada uno solicitará la información que estime necesaria y va a haber un trabajo de los abogados desde lo legal, más allá de lo político. No puedo emitir opinión sobre si es una cuestión que se debe resolver en el ámbito de la convención o la deberá resolver luego el Concejo Deliberante. Hay que ser cautos y esperar a que se vayan dando los momentos”, dijo, teniendo en cuenta que también se pretende la destitución de Branca como concejal.
Urquiza consideró que “no deja de ser una situación que empaña el trabajo de la convención, después de haber recibido tantos proyectos, incluso iniciativas de particulares que están manifestando su interés sobre determinados temas”, y concedió que, de ser destituido Branca, “cualquier votación puede ser puesta en duda y cualquier individuo puede poner en duda lo que se votó”.
Muchos proyectos, y muchos desechados
Por otra parte, destacó la cantidad de asuntos ingresados el lunes, tanto de los bloques como de particulares. Explicó que primero fueron analizados por la comisión de Labor Parlamentaria, y luego remitidos a la única comisión temática.
Adelantó que muchos pueden ser desechados porque “desde lo técnico podemos modificar solamente los artículos que están llamados a reforma, pero no deja de ser interesante que los vecinos y las instituciones manifiesten sus preocupaciones sobre determinados temas”.
“Por ahí se confunden algunos temas que no corresponde que vayan en la carta orgánica, sino que forman parte de una ordenanza o de modificaciones a otras normativas que están vigentes. Nosotros pudimos apreciar durante la campaña que los vecinos planteaban ciertos problemas, pero la carta orgánica habla de lo macro y nos da los lineamientos principales. Después se trabaja en distintas ordenanzas y reglamentaciones propias del Departamento Ejecutivo Municipal, o de leyes provinciales”, explicó.
Ante la confusión de los vecinos que se trasluce en los proyectos presentados, estimó que “tenemos como deuda dar a conocer la carta orgánica y esto es fundamental. En una de las atribuciones y deberes del Concejo Deliberante planteamos trabajar en esto. La Constitución provincial en un artículo habla del deber de enseñar la Constitución provincial y desde la Legislatura se trabaja en esto, se ha avanzado, se promete la Constitución y se hace un trabajo previo al aniversario de la jura. Me parece que esto está faltando en la ciudad, porque cuando se sancionó la Carta Orgánica se debía enviar un ejemplar a cada escuela, pero hay que trabajarla, porque tiene muchos institutos de participación y realmente hay que explicarle esto a los vecinos y enseñarle a nuestros niños y adolescentes qué es la Carta Orgánica y cuáles son los derechos y deberes que tenemos como vecinos, principalmente cuando hablamos del ambiente, del desarrollo económico”, dijo.
“Hay un montón de temas que están hace más de 20 años en nuestra carta orgánica y existe mucho desconocimiento. A medida que uno la va leyendo, va encontrando temas cada vez más interesantes, no para desarrollarlos en la carta orgánica sino para lo que sería la reglamentación de los artículos, que son las ordenanzas”, reiteró.
De todos los proyectos ingresados, dijo que empezó a leer “los artículos de los que más se hablaba y los asuntos de particulares, pero no tuve tiempo de verlo en detalle. Esta es la tarea que comienza ahora y muchos pueden no ser tenidos en cuenta, pero la intención no es que queden en la letra fría de un papel o una presentación. Desde nuestro espacio va a ser algo que vamos a tomar y buscaremos trabajarlo”, concluyó.
