La ministra de Salud de Tierra del Fuego, Judit Di Giglio, realizó un fuerte análisis de la situación sanitaria del país y de la provincia, tras participar del último encuentro del Consejo Federal de Salud (COFESA) y del Congreso Internacional de Salud Pública, espacios donde –según subrayó– quedó en evidencia la falta de conducción del Ministerio de Salud de la Nación. Por otro lado, resaltó que “el país atraviesa un cambio profundo en la pirámide poblacional, dado que “entre 2019 y 2024 la natalidad en Tierra del Fuego cayó un 50%”. También señaló que “este año el 50% de los cupos de pediatría quedó vacante en el país. Necesitamos políticas públicas que incentiven a los jóvenes a estudiar medicina y a elegir las especialidades que la población requiere. Además, marcó que otro de los puntos críticos es el aumento sostenido de la población que se vuelca al sistema público tras perder su empleo o cobertura privada, donde en “Tierra del Fuego hay entre 57.000 y 60.000 personas que dependen exclusivamente de la salud pública”.
Río Grande.– En declaraciones a FM Espectáculos, la ministra de Salud de Tierra del Fuego, Judit Di Giglio, sostuvo que la coyuntura actual es “muy compleja” y marcó diferencias con experiencias anteriores, señalando que “el diálogo entre ministros siempre fue muy bueno, pero hoy no tenemos un Ministerio de Salud de la Nación que ejerza su rol rector. No hablamos de dinero, sino de decisiones estratégicas como lo es el examen único de residencias, los programas de inmunización, la ley de Mil Días, salud sexual y reproductiva, VIH. Todo eso debe conducirlo Nación, y hoy no está sucediendo”.
Un COFESA sin conducción
Di Giglio reveló que en la última reunión del Consejo Federal participaron apenas diez provincias, “algo que nunca había ocurrido”.
En este sentido, señaló que “la pérdida de peso político del organismo se traduce en frustración, hoy asistimos para charlar entre nosotros y lamentarnos, porque las decisiones no llegan. El examen único de residencias desaparecerá y quedará en manos de cada provincia, lo que para nosotros es un grave problema”.
En contraste, valoró el Congreso de Salud Pública, donde expuso el proyecto del Centro de Rehabilitación de Tierra del Fuego ante más de mil profesionales, manifestando que “ahí sí hubo debate y consenso entre ministros de signos políticos opuestos, como los de la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires. El camino siempre es el diálogo y la toma de decisiones en conjunto. Que no pueda darse lo mismo en el COFESA es muy triste”.
Cambios demográficos y nuevos desafíos
La ministra planteó que el país atraviesa un cambio profundo en la pirámide poblacional, dado que “entre 2019 y 2024 la natalidad en Tierra del Fuego cayó un 50%”.
Al mismo tiempo crece la expectativa de vida y la demanda de servicios para adultos mayores.
“En Ushuaia no tenemos geriátricos habilitados ni públicos ni privados, y la necesidad es enorme”, advirtió. “Debemos formar gerontólogos, terapistas ocupacionales, psiquiatras especializados, porque la demanda del adulto mayor está creciendo a un ritmo acelerado”.
Falta de médicos pediatras
“Este año el 50% de los cupos de pediatría quedó vacante en el país. Necesitamos políticas públicas que incentiven a los jóvenes a estudiar medicina y a elegir las especialidades que la población requiere. Una provincia sola no puede resolverlo, debe ser una estrategia nacional”, dijo la funcionaria alertando sobre la falta de médicos pediatras.
Más demanda en el sector público
Otro de los puntos críticos es el aumento sostenido de la población que se vuelca al sistema público tras perder su empleo o cobertura privada, para lo cual Di Giglio dijo que “en Tierra del Fuego hay entre 57.000 y 60.000 personas que dependen exclusivamente de la salud pública”.
Al respecto, sostuvo que “esto significa un incremento del 30% en los últimos diez meses”, dijo, al tiempo que agregó que “cada vez más gente pierde su prepaga y recurre al hospital público, mientras las provincias reciben menos recursos por coparticipación, es una situación insostenible”, sentenció.
El rol de hospitales de referencia y el caso Garrahan
Di Giglio también expresó preocupación por el deterioro de hospitales de referencia como el Garrahan, clave en la formación de especialistas al marcar que “el daño no es solo presente. Si el Garrahan se debilita, en veinte años no tendremos pediatras oncológicos o cirujanos cardiovasculares infantiles. Hoy el 80% de los tumores infantiles se atienden en el sistema público, y la mitad en el Garrahan. Es un recurso de excelencia que no podemos perder”.
Situación provincial: obras y programas
Respecto a la obra del Hospital Regional Ushuaia, confirmó que “avanza a buen ritmo, esperamos que la construcción esté finalizada hacia fines del próximo año, es una infraestructura estratégica y maravillosa para la provincia”.
En cuanto a programas nacionales, advirtió que “la mayoría se encuentran paralizados, con excepción del Programa de Inmunizaciones, sería ilógico que no siguiera, por la logística y la compra de vacunas, pero incluso ahí hay problemas, el resto de los programas están prácticamente cortados”.
La Ley Nicolás y el futuro inmediato
Consultada por la Ley Nicolás, recientemente aprobada por el Senado para garantizar protocolos de seguridad en la atención, la ministra explicó que “aportará un marco legal, pero no implicará grandes cambios en el sistema fueguino”.
“Son prácticas que ya deberían realizarse. La adhesión provincial seguramente se trabajará el año próximo, una vez reglamentada”.
Finalmente, Di Giglio reconoció el clima de incertidumbre y malestar social, manifestando que “así como en la pandemia gestionábamos día a día, hoy sucede lo mismo pero en otro plano: el económico y el social. La incertidumbre genera un estrés enorme en la población, en los trabajadores y en quienes gestionamos. Pero seguimos sosteniendo la salud pública, que debe ser prioridad para todos”.
