“Se puso en números lo que todos habíamos visto, que fue una buena temporada”

El presidente de la Cámara de Turismo Ángel Brisighelli dijo que no fue una sorpresa el informe del INFUETUR sobre la ocupación hotelera de febrero de este año, porque ya se sabía que fue una buena temporada. Para el invierno hay buenas perspectivas, sobre todo de recuperar el turismo brasileño, que es protagonista en época invernal. También se esperan los equipos de esquiadores y dependerá de las condiciones climatológicas que se confirmen las consultas que se están recibiendo. Para el próximo verano será necesario recuperar los 14 vuelos diarios que tenía la capital fueguina, a fin de contener la demanda de los cruceros antárticos, que hacen su reserva con anticipación, y el turismo nacional que quiera visitar el destino. Además cifró expectativas en la finalización de las obras del glaciar Martial, que es importante para la ciudad y tiene movimiento todo el año.

Río Grande.- El presidente de la Cámara de Turismo, Ángel Brisighelli, hizo referencia a la ocupación hotelera durante el mes de febrero, con una recuperación importante después de los años de pandemia.

De acuerdo al informe del INFUETUR, tanto los viajeros hospedados como las pernoctaciones en Ushuaia registraron importantes crecimientos con respecto al mismo mes del año 2021 (159% y 149%, respectivamente). Comparado con el mismo mes, pero del año 2019, los viajeros se encuentran ya en los mismos niveles (+2,7%) y los pernoctes presentan una variación por encima del 30,6%.

En el acumulado del primer trimestre, la categoría hotelera que mayor cantidad de pernoctes concentró fueron los hoteles de 4 y 5 estrellas, seguido por hoteles 3 estrellas. La Provincia de Buenos Aires concentró la mayor cantidad de pernoctes (18,6%), seguida por Ciudad Autónoma de Buenos Aires (14,3%).

Respecto de la ocupación hotelera y parahotelera en Río Grande, tanto los viajeros hospedados como las pernoctaciones registraron disminuciones comparado con el mismo periodo del año anterior (-35% y -50%, respectivamente). Comparado con el mismo mes del año 2019 (pre pandemia), tanto los viajeros hospedados como los pernoctes en febrero 2022 aún se encuentran por debajo de los niveles de febrero 2019: -55,5% y -70,6% respectivamente.

En el caso de Ushuaia “no fue ninguna sorpresa lo que publicó el INFUETUR, sino una confirmación de lo que todos estábamos esperando. Se puso en números lo que todos habíamos visto, que fue una buena temporada. Hubo muy poco turismo internacional, muy pocos cruceros, pero muchísimo turismo nacional producto del cierre de fronteras, del Pre Viaje, y distorsiones que generó la pandemia. Eso dio una temporada con una cantidad de pasajeros realmente importante. Si bien Ushuaia es el único destino del país que siempre tuvo más turismo internacional que nacional, el número no estaba muy lejos de un 50 y 50. La participación del turismo doméstico siempre fue importante, lo que pasa es que el turismo internacional tiene un poder adquisitivo más importante, más en la situación de Argentina donde el dólar blue hace los precios extremadamente accesibles para cualquier extranjero”, sostuvo a Radio Universidad 93.5 y Provincia 23.

“Este año, con todas las distorsiones que hubo, el turismo nacional dominó la temporada y, si bien hubo un poco menos cantidad de personas que otros años, pasamos de una estadía promedio de dos o tres noches, a casi seis. Eso permitió que con menos cantidad de pasajeros y menos vuelos pudiéramos mantener niveles importantes de ocupación y movimiento. Por ese lado el turismo nacional es más conveniente que el extranjero, porque se quedan más noches en el destino y esto permite otra distribución de los pasajeros. Cuando están dos o tres noches, hacen las excursiones tradicionales y no salen de Ushuaia; pero cuando se quedan más días empiezan a buscar otras opciones y esto genera una atomización de pasajeros y muchos servicios pueden trabajar en forma permanente con un buen volumen. Le permite tener una buena temporada a mucha más gente”, destacó.

 

Temporada de invierno

 

Para el invierno las perspectivas son por demás alentadoras: “Tenemos dos segmentos de turismo muy diferentes, el tradicional que hace las excursiones y los paseos, que quizás está tres noches; y por otro lado está el esquiador, que se queda una semana completa”, dijo.

A fines de mes inicia la temporada del Cerro Castor y se han abierto las fronteras, lo que genera otras expectativas para el turismo extranjero. “Tenemos buenos indicadores para la temporada de invierno. Estamos nuevamente con fronteras abiertas, sin restricciones importantes, porque el único requisito es el esquema de vacunación completo. El turismo internacional que pueda venir a la Argentina es de un segmento socioeconómico alto. Tenemos buenas expectativas del mercado brasileño, que es el más importante en invierno. Además tenemos dos vuelos semanales que se han anunciado desde San Pablo a Ushuaia, y hay gente que hace tres años no puede esquiar a ningún lado. Este año van a estar con todo el deseo de salir y somos bastante optimistas sobre el turismo brasileño”, afirmó.

“El único factor que queda por ver son las condiciones meteorológicas, la cantidad de nieve. El esquiador contrata el paquete cuando tiene asegurado que hay nieve. Hay muchas consultas, cotizaciones, pero los niveles de confirmación son bajos. Eso es normal y todos los años ha sido así. En la medida que lleguemos a la temporada de esquí con el cerro con nieve, sabemos que esas consultas empiezan a confirmarse. Tenemos esperanza de que el movimiento de invierno va a ser bueno”, reiteró.

Recordó que “el año pasado nadie podía salir del país y la gente que estaba acostumbrada a pasar sus vacaciones de invierno en Europa, Brasil, el Caribe, no lo pudo hacer y decidió viajar dentro de Argentina. Hubo un volumen de esquiadores nuevos mucho más alto de lo normal y se concentró en Ushuaia, de manera inusual, inesperada y por supuesto muy bienvenida”.

Al margen de la explosión de turismo nacional del año pasado, en condiciones normales “en invierno el mercado más importante es el brasileño y en verano se ve más diluido, y pasa a ser más importante el americano o europeo. Para estos segmentos en invierno es más económico ir a otras partes del mundo que a Ushuaia. Estados Unidos, Canadá y Europa son grandes destinos de turismo de esquí y no tenemos un gran volumen de gente de esos destinos. Es diferente con los equipos de alto rendimiento, porque ya hablamos de entrenamiento y no de vacaciones”, diferenció.

“Los que vienen a entrenar se quedan 30 días y hay reservas. Incluso el año pasado, con todo el lío que había, se autorizó a uno de los equipos a entrenar, que vino de Austria. Para este año, en condiciones más normales de circulación, el deseo de venir a entrenar a Ushuaia está y estamos expectantes por saber cuántos van a venir. Es razonable que sean un poco menos que en años normales, pero lo importante es empezar, y principalmente son equipos europeos. Hemos tenido equipos de España, Francia, Alemania, Suiza, Croacia, Italia, Austria, y son comitivas importantes porque no son solamente los esquiadores sino el cuerpo técnico y toda la estructura de soporte, como la gente que se encarga del mantenimiento de las tablas. Son entre 25 y 30 personas por grupo que se quedan 30 días en Ushuaia y consumen. Esto no sólo beneficia al Cerro Castor, porque se alojan en hoteles, contratan transporte para ir y volver a la ciudad, comen en la ciudad, salen a dar vueltas, compran algunas cosas. Si bien no es el turismo tradicional, deja una cantidad de dinero importante. Para ellos el costo de consumir en Argentina en general es bajísimo”, observó.

 

Aerosilla del Martial

 

Por otra parte se lo consultó sobre la obra de la aerosilla. “La licitación se hizo hace más de tres años, en la gestión de Bertone y Luis Castelli, y tuvo un avance muy tibio. Con el tema de la pandemia se paró y no se avanzó nada, finalmente para destrabar la situación el INFUETUR firmó una adenda del contrato con el concesionario el año pasado para reiniciar las obras. Hace poco hablé con el presidente del INFUETUR y nos dijo que, si bien las obras no son muy visibles, la aerosilla está en construcción en Suiza y pasado el invierno empezarían la obra civil para la instalación. Claramente no va a estar lista para este verano”, advirtió.

“El glaciar Martial es un centro más cercano y económico para la gente de Ushuaia y tiene muchísimo movimiento en verano. Se hace trekking, caminatas, y cualquiera que vaya a caminar al Martial se encuentra con más de 100 personas. Es un área que tiene movimiento todo el año y la zona es importante para el turismo de Ushuaia. Esperemos que se solucione”, deseó.

 

Vuelos limitados

 

Brisighelli indicó que, en materia de vuelos, por los meses de mayo y julio se llega a cubrir la demanda, pero deberán aumentar para la temporada de invierno y mucho más para el próximo verano. “En este momento Ushuaia está en el momento más bajo de movimiento del año y tenemos solamente cuatro vuelos diarios. Está bien en líneas generales para el volumen que hay. Obviamente en julio, agosto y septiembre tiene que incrementarse a seis u ocho vuelos diarios. Para el verano vamos a necesitar recuperar las 14 frecuencias, de lo contrario vamos a tener un problema muy serio para recibir pasajeros. Estamos esperando una temporada de verano más normal y la demanda de turismo antártico va a ser muy grande. Están previstas alrededor de 530 recaladas de cruceros y va a haber una presión muy alta sobre los vuelos regulares. De no tener más frecuencias vamos a estar en problemas, porque el pasajero antártico reserva con mucha anticipación y, si el turismo nacional quiere venir a Ushuaia no lo va a poder hacer, porque los vuelos van a estar contratados con anticipación por el turismo extranjero. En esto está trabajando el INFUETUR y la Cámara Argentina de Turismo”, dijo.

 

Camas en aumento

 

En cuanto a la capacidad de camas, indicó que “este año tuvimos la inauguración de un hotel hace pocos meses y la ampliación del Albatros, con 90 habitaciones más, que son unas 180 camas entre ambos. Por otro lado, la pandemia generó que establecimientos de ocho o nueve habitaciones quedaran en el camino. En los últimos cinco o seis años ha ido aumentando la cantidad de camas y hay proyectos de construcción de hoteles, como el anuncio del año pasado de un hotel de cinco estrellas. Todavía nadie hizo ningún tipo de obras, pero sabemos que hay dando vueltas proyectos de construcción o ampliación de hoteles. El hostal del Bosque amplió su capacidad, también va a haber una ampliación en el Canal de Beagle y hay un aumento lento pero constante”, concluyó.

 

 

 

 

 

 

 

 

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