El Gobierno dio a conocer este jueves el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de enero, que marcó una suba del 2,2%. Sin embargo, provincias que miden a la par de Nación mostraron una fuerte dispersión, con guarismos que oscilaron entre el 1% y el 3,5%. El índice que mide el Indec así mostró una desaceleración en comparación con el 2,7% de diciembre. El Gobierno apunta a perforar el 2% este mes.
Buenos Aires.- El Indec informó que la inflación de enero fue de 2,2% y así marcó una desaceleración en comparación con el 2,7% que había registrado diciembre. De esta forma, la suba interanual de precios fue de 84,5 por ciento.
El índice mensual es el más bajo desde mediados de 2020, un año en que la fuerte recesión derivada de la pandemia hizo caer el ritmo de precios en la economía. A su vez, el índice interanual acumula nueve meses consecutivos en baja y fue el menor desde septiembre de 2022.
En el primer mes del año, las divisiones de mayor aumento fueron Restaurantes y hoteles (5,3%), por subas estacionales del período vacacional, y Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (4,0%), por incrementos en los alquileres. En el otro extremo, los menores aumentos se registraron en Educación (0,5%) y en Prendas de vestir y calzado, rubro en el que se registró deflación (-0,7%).
A nivel de las categorías, “los precios regulados (2,6%) lideraron el incremento, seguidos del IPC núcleo (2,4%), mientras que los Estacionales aumentaron 0,6%”, explicó el Indec.
Al igual que los últimos meses, se mantuvo la fuerte diferencia entre la inflación de bienes (1,5%) y servicios (3,8%).
Desde el ministerio de Economía, destacaron que “este sendero de reducción en la inflación se da en un contexto de crecimiento del nivel de actividad (+6,4% acumulado entre abril y noviembre según el EMAE desestacionalizado) y suba en los ingresos de la población, destacándose los incrementos en términos reales en diciembre de 18% i.a. en el salario promedio del sector privado registrado (SIPA), 12,8% i.a. en el haber jubilatorio y 107% i.a. en la Asignación Universal por Hijo”.
El índice de enero es el último que tuvo lugar bajo el esquema cambiario de actualización del dólar oficial a ritmo de 2% por mes. El Gobierno activó un retoque en el esquema cambiario esta semana luego de haber esperado un trimestre con un IPC cercano a 2,5 por ciento. Así, el tipo de cambio oficial pasa a moverse a un ritmo de 1% mensual. Esa es la velocidad a la que el Ministerio de Economía apunta a que tiendan a converger los bienes, que explican cerca de un 65% de la canasta que toma en consideración el Indec para elaborar el índice de precios, más allá de los servicios.
La proyección para febrero
La expectativa oficial el que la inflación perfore rápidamente el 2 por ciento. El ministro de Economía Luis Caputo aseguró la semana pasada en una entrevista que hay posibilidades de que el índice de precios de febrero sea menor al 2%, una expectativa de desinflación más rápida de la que tiene el mercado. “Ojalá empiece en febrero con 1, el proceso de desinflación va a continuar, el orden macro va a continuar. El proceso es inevitable y esperamos que siga sorprendiendo”, afirmó el funcionario.
Por lo pronto, la primera semana de febrero mostró un marcado repunte en los indicadores de inflación semanales que miden la variación de los precios de alimentos y bebidas, principalmente en el Gran Buenos Aires. Esa aceleración estuvo explicada por el aumento de precio de la carne, que tiene un peso alto en la canasta total que mide el Indec, por lo que un movimiento en ese rubro tiene un impacto considerable en el indicador general.
Dos consultoras que hacen seguimiento semanal de precios observaron la misma tendencia. LCG mencionó que “a comparación de la semana pasada, la primera semana de febrero presentó un fuerte incremento en el porcentaje de productos con aumentos de precios: 10 puntos porcentuales, abarcando al 21% de la canasta relevada”, aseguró. En los primeros días de este mes la suba de precios semanal fue de 2,3%, el número más alto para esta serie desde la segunda semana de marzo.
“Febrero comienza con una inflación semanal de 2,3% en nuestro Relevamiento de Precios de Alimentos y Bebidas. Se sostiene la estacionalidad de las primeras semanas de cada mes con subas por encima de las semanas previas. La inflación promedio arrojó una suba del 2,2% mensual sumando la cuarta semana en ascenso”, concluyó esa consultora.
Por su parte, Equilibra también midió una fuerte aceleración semanal, desde 0,3% a 1,1 por ciento. “La suba estacional de la carne vacuna ya se siente en el mercado minorista: en la semana, el rubro ‘Carnes y otros derivados’ trepó 2,6% (carne vacuna: 3,7%), llevando a los Alimentos y bebidas sin estacionales y al Nivel General a 1,1% semanal. En la medición 4 semanas móvil, el Nivel General trepó 2,0% y el IPC Núcleo 1,9%”, resumió un informe reciente con datos de los primeros días de febrero. A diferencia de LCG, Equilibra proyecta una perspectiva de IPC general a partir de estos datos, y espera un 2%, similar a lo que ya estimaban para enero.
Lo que suceda con la carne será determinante para la inflación general por el peso que el Indec le otorga a ese rubro en la conformación de la canasta que mide los precios todos los meses. Para el caso del Gran Buenos Aires, carnes explica casi el 7% del total, aunque en otras regiones explica incluso una proporción mayor, como en el Noreste (13,2%) y Noroeste (12,5 por ciento).
Inflación de enero medida en provincias: con alta dispersión, el tope fue del 3,5%
Neuquén registró la mayor suba durante el mes pasado, mientras que Mendoza reportó apenas un 1%. A nivel nacional, el alza fue del 2,2%.
De acuerdo a lo difundido por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), la inflación se desaceleró respecto a diciembre, cuando marcó 2,7%. A la par, la variación interanual se ubicó en el 84,5% Se trata del primer índice de precios al consumidor (IPC) acumulado interanual de dos dígitos desde enero de 2023.
No obstante, los tres distritos que presentan sus datos el mismo día que el INDEC exhibieron números diversos. Neuquén marcó el tope del ranking, con un alza del 3,5%, seguida por Córdoba, con el 2,2%. Última se ubicó Mendoza: 1%.
Previamente, la Ciudad de Buenos Aires había publicado que la suba de precios en el distrito durante enero fue del 3,1%. Bahía Blanco, en tanto, reportó un alza en su IPC del 2,3%, casi en espejo a los datos nacionales.
Fuerte dispersión en la inflación de provincias
Neuquén marcó el tope de la cima, con una escalada del IPC del 3,5%, marcando una aceleración en referencia a diciembre, cuando el guarismo había arrojado un 2,7%.
En tanto, la variación interanual en el distrito fue del 98,9%, de acuerdo a la Dirección Provincia de Estadística y Censos de la provincia de Neuquén.
Según consignó el organismo, las divisiones que más variaron fueron Restaurantes y hoteles (8,3%), Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles (7,4%) y Bienes y servicios varios (6,7%). Por su parte, las variaciones mensuales más bajas se registraron en las divisiones Prendas de vestir y calzado (-2,0%), Equipamiento y mantenimiento del hogar (1,0%) y Educación (1,1%)
Los Bienes registraron un aumento de 1,9%, inferior al de los Servicios (5,7%). Las variaciones interanuales fueron 66,2% y 167,8%, respectivamente. Los bienes y servicios incluidos en la categoría Núcleo fueron los de mayor aporte al nivel general con 2,24 p.p.
Destacaron las contribuciones en carne bovina, alquiler de la vivienda, alimentos preparados en restaurantes, alimentos preparados para llevar, consultas médicas y odontológicas y adquisición de vehículos.
Por su parte, los bienes y servicios Estacionales tuvieron una incidencia de 0,04 p.p., que se explica por los aumentos en los precios de paquetes turísticos, alojamiento turístico y frutas. También impactó la disminución de los precios en prendas de vestir, calzado y verduras.
En el caso de los bienes y servicios Regulados, la incidencia fue de 1,25 p.p. Las principales contribuciones corresponden a suministro de agua y combustibles para vehículos.
Córdoba, en tanto, midió una suba del 2,2% en el IPC respecto al mes anterior.
En el desagregado, la variación mensual del IPC-Cba fue de la siguiente manera: alimentos y Bebidas, 2,6; Indumentaria y Calzados, 0,1%; Propiedades, Combustibles, Agua y Electricidad, 2,9;Equipamiento y Mantenimiento del Hogar, 1,2; Salud, 1,9; Transporte y Comunicaciones, 2,4; Esparcimiento, 2,0; Enseñanza, 0,8; y Bienes y Servicios Varios, 2,5.
Por su parte, Mendoza comunicó que el nivel general del Índice de Precios al Consumidor para el Gran Mendoza registró en Enero un incremento del 1,0% con relación al mes anterior.
De acuerdo a la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Generales (DEIE), la suba por los rubros fue: Alimentos y bebidas 0,4; Indumentaria -0,1; Vivienda y servicios básicos 0,1; Equipamiento y mantenimiento del hogar 0,1; Atención médica y gastos para la salud 0,1Transporte y comunicaciones 0,1 Esparcimiento 0,2Educación 0,0; y Otros bienes y servicios 0,1.
CABA se anticipó: 3,1% en enero
Una semana antes de que se conozca el IPC medido por el INDEC, la inflación de la Ciudad de Buenos Aires se desaceleró en enero, al registrar un 3,1%, por debajo del 3,3% de diciembre, informó este viernes el Instituto de Estadística y Censos porteño.
El Índice de Precios al Consumidor de CABA (IPCBA) acumuló en los últimos 12 meses un 100,6%, y se redujo fuertemente por segundo mes consecutivo, ya que venía de un 136,7% en diciembre, y cerca de 180% en noviembre. Esto se explica debido a la fuerte inflación de noviembre y diciembre, que ya no ingresan en el acumulado interanual.
Lo que más aumentó en el primer mes de 2025 en CABA fueron Recreación y cultura (7,7%), Seguros y servicios financieros (7%), y Restaurantes y hoteles (6%).
En tanto, el segmento de Alimentos y bebidas no alcohólicas perforó el 2%, al anotar una suba de 1,9%. Al interior de la división, los principales impulsos provinieron de Carnes y derivados (2,9%), Frutas (5,7%), Leche, productos lácteos y huevos (1,3%) y Pan y cereales (0,9%).
Cabe destacar que, en la primera semana de febrero las carnes volvieron a aumentar y generaron una aceleración de la inflación de alimentos.
En enero hubo deflación en los precios de la ropa
En el sector aseguran que la baja responde a la caída en las ventas y la búsqueda por no perder mercado, pero no por la apertura de importaciones. El ingreso de prendas de vestir desde el exterior cayó 17% en 2024
El precio de la ropa marcó en enero una deflación y fue la categoría que registró el menor aumento en el último año, según los datos que publicó este jueves el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec). En el sector aseguraron que esa dinámica tuvo que ver con la caída en la demanda frente a un menor poder adquisitivo del público y el encarecimiento de los costos en dólares, mientras que negaron una reacción directa a la apertura de importaciones.
El Indec informó que la suba del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del mes pasado fue 2,2% mensual, la más baja desde julio de 2020, y del 84,5% acumulada en los últimos doce meses. Dentro del índice, la categoría prendas de vestir y calzado mostró una variación negativa del 0,7% respecto a diciembre y 63,7% interanual, es decir, por debajo del nivel general.
“Los precios de la ropa cayeron en enero. Pero esto no se explica por la apertura de la economía ya que, por el contrario, las importaciones de ropa cayeron. Bajan los precios porque no hay demanda. No se vende ni nacional, ni importado y las empresas están trabajando con rentabilidades incluso negativas, haciendo un gran esfuerzo para no perder mercado, cubrir al menos una parte de los costos fijos y no despedir personas q les costo formar”, dijo Luciano Galfione, presidente de la Fundación Pro Tejer.
“No es un tema estacional porque los costos están subiendo en dólares”, afirmó Galfione en referencia al atraso cambiario en términos reales.
En el Gran Buenos Aires las prendas de vestir tuvieron el mes pasado una deflación del 3,2% y calzado 0,5%, según las categorías que componen el rubro prendas de vestir y calzado del Indec.
Fuentes del sector también descartaron la posibilidad de que la explicación de la baja de precios sea la apertura comercial que impulsa el Gobierno de Javier Milei. Los datos a los que accedió Infobae reflejaron que durante 2024 las importaciones de prendas de vestir se desplomaron 17% frente al año anterior.
El rubro de prendas de vestir y calzado ayudó para que el dato de inflación de enero sea el más bajo desde julio de 2020. Fue por las “liquidaciones de verano” según el economista Camilo Tiscornia.
En la Argentina se vende la ropa más cara de la región y de las más costosas a nivel mundial. Esta tendencia comenzó a notarse en el país desde la salida de la convertibilidad a partir del creciente proteccionismo, la presión impositiva, la alta inflación y la constante inestabilidad macroeconómica. Sin embargo, algunas prendas sí se encuentran a precios competitivos.
Esas conclusiones se desprenden de un informe de Fundar publicado a finales del 2024 en el que se recopilaron 390.000 precios on line en 33 prendas de vestir a nivel local e internacional, con una reconstrucción de series estadísticas de cada uno de los países analizados.
El trabajo muestra que en términos absolutos una canasta de prendas del canal on line de Argentina al tipo de cambio oficial resultó 35% más costosa que en el resto de la región en abril y 16% más cara si se toma en cuenta la cotización del dólar MEP. Fundar comparó la situación en la Argentina frente a Perú, Uruguay, México, Chile, Colombia y Brasil.
Según el Indec, los bienes en enero registraron una inflación del 1,5% mensual, por debajo del ritmo de ajuste del tipo de cambio oficial vigente hasta ese mes y que desde febrero pasará al 1% como parte de la estrategia del Gobierno para apuntalar la desaceleración de la inflación. La división subió 64,5% interanual. En cambio, los servicios subieron en enero 3,8% y 152,4%, respectivamente, por lo que mostraron un movimiento muy superior al promedio general en ambos casos.
En el primer mes del año, las divisiones de mayor aumento fueron restaurantes y hoteles (5,3%), por subas estacionales del período vacacional, y vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (4,0%), por incrementos en los alquileres. En el otro extremo, los menores aumentos se registraron en educación (0,5%) y en prendas de vestir y calzado.
A nivel de las categorías, “los precios regulados (2,6%) lideraron el incremento, seguidos del IPC núcleo (2,4%), mientras que los Estacionales aumentaron 0,6%”, explicó el Indec.
Desde el ministerio de Economía, destacaron que “este sendero de reducción en la inflación se da en un contexto de crecimiento del nivel de actividad (+6,4% acumulado entre abril y noviembre según el EMAE desestacionalizado) y suba en los ingresos de la población, destacándose los incrementos en términos reales en diciembre de 18% interanual en el salario promedio del sector privado registrado (SIPA), 12,8% i.a. en el haber jubilatorio y 107% interanual en la Asignación Universal por Hijo”.
El índice de enero es el último que tuvo lugar bajo el esquema cambiario de actualización del dólar oficial a ritmo de 2% por mes. El Gobierno activó un retoque en el esquema cambiario esta semana luego de haber esperado un trimestre con un IPC cercano a 2,5 por ciento. Así, el tipo de cambio oficial pasa a moverse a un ritmo de 1% mensual. Esa es la velocidad a la que el Ministerio de Economía apunta a que tiendan a converger los bienes, que explican cerca de un 65% de la canasta que toma en consideración el Indec para elaborar el índice de precios, más allá de los servicios.
La expectativa oficial el que la inflación perfore rápidamente el 2 por ciento. El ministro de Economía Luis Caputo aseguró la semana pasada en una entrevista que hay posibilidades de que el índice de precios de febrero sea menor al 2%, una expectativa de desinflación más rápida de la que tiene el mercado.